El jefe de la Policía ofreció ayer amplios detalles sobre las medidas reformadoras adoptadas en su gestión para adaptar la misión policial a una sociedad democrática.

En el Distrito Nacional, una demarcación de 91.8 kilómetros cuadrados, entre enero de 2006 y junio de 2009 se produjeron 1,008 homicidios, para un promedio mensual de 28 casos, de acuerdo con las estadísticas de la Procuraduría Fiscal de la Capital.

Asimismo, en el primer semestre de 2009 ocurrieron 129 homicidios, de los cuales el 94 por ciento corresponde a hombres y el 6 por ciento a mujeres. El 80% del total de casos se cometió con armas de fuego y el 16% con armas blancas.

El fiscal del Distrito Nacional, Alejandro Moscoso Segarra, ofreció los datos durante el almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio. Precisó que el 50 por ciento de esos hechos se produjeron de viernes a domingo.

Con relación al horario, el 61 por ciento de los casos ocurrió de 6:00 de la tarde a 6:00 de la mañana, y el 39% de 6:00 de la mañana a 6:00 de la tarde.

El representante del Ministerio Público, quien asistió al encuentro para presentar un Plan de Investigación que ejecuta la Fiscalía conjuntamente con la Policía Nacional, reveló, además, que en el período citado el 2% de los homicidios está vinculado con la violencia intrafamiliar.

Asimismo, que el 3% fue accidental, el 4% por drogas, un 10% por asuntos pasionales, un 14% por razones indeterminadas, un 14% en enfrentamientos con la Policía, un 25% por robos y atracos y un 35% por riñas.

Al medirse el móvil de los hechos, el 44% está vinculado con la delincuencia, y el 56% no relacionados con la delincuencia.

La tasa de homicidio por cada 100,000 habitantes en enero-junio fue de 25.14%, y el promedio mensual de 22, de acuerdo con el funcionario judicial.

Casos judicializados. Moscoso Segarra planteó que los índices de procesos penales concluidos le hacen un mentís a quienes mantienen la teoría de que, a partir de la aplicación del Código Procesal Penal vigente desde 2005, se ha estancado la administración de la justicia en el país.

Con relación a las medidas de coerción tomadas en los casos de homicidio, el 88% tiene dictamen de prisión preventiva, a un 6% se le dictaminó garantías económicas y a un 6% la presentación periódica al Ministerio Público.

Ahora hay más presos preventivos con relación al viejo modelo, dijo.

Al referirse al tiempo que tardan los procesos en el Ministerio Público, dijo que el promedio de duración entre la fecha en que se cometió el hecho, el apresamiento y la medida de coerción de los casos judicializados es de tres días.

El 75% de los casos procesados se llevaron a cabo en menos de una semana, a partir de la ocurrencia del hecho, y el 20% de los expedientes procesados están en audiencia preliminar, explicó.

En el período citado se han evacuado 85 autos de apertura a juicio contra cuatro autos de no ha lugar, expresó el fiscal del Distrito Nacional.

Agregó Alejandro Moscoso Segarra que en la jurisdicción de fondo se han producido 56 sentencias condenatorias y sólo cinco sentencias absolutorias.

Las claves

1. De subalterno nada…

El jefe de la Policía, Rafael Guillermo Guzmán Fermín, teorizó hasta más no poder sobre la preponderancia del Ministerio Público en las investigaciones criminales, por encima del organismo que dirige. Pero en el encuentro él fue batuta y constitución.

2. El trofeo del general

Santo Domingo es una de las tres ciudades más seguras de América Latina, según una noticia que transmitió CNN, y que fue presentada en el encuentro como una de las mayores distinciones del jefe de la Policía, quien bromeó hasta más no poder con que en la reunión el jefe era él.

3. Un fiscal conforme

El fiscal Moscoso Segarra admitió que a la instancia que representa le faltan recursos para perfeccionar la investigación, pero él es conforme, porque destacó que pese a eso tienen resultados efectivos.

Policía y fiscales

Al jefe de la Policía Nacional, mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, se le preguntó cuáles mecanismos utiliza ese organismo para hacerle entender a sus oficiales, sobre todo a los de las provincias, que en materia de investigación criminal están bajo las órdenes del Ministerio Público.

El oficial respondió que se hacen esfuerzos para lograr el cambio de mentalidad, pero al resaltar que ese proceso es complejo, pidió la comprensión de la ciudadanía por la lentitud del cambio cultural.

El proceso de transformación de la Policía tiene que ser gradual, solamente la creación de la Dirección General de Estadística se tomó ocho meses, y casi un año el hacerle entender a los oficiales que esa es una herramienta necesaria para la toma de decisiones.

Es un proceso de aprendizaje, y llevar eso al interior del país es una tarea titánica, pero llegará de manera oportuna, dijo el general, quien además se refirió a la falta de recursos tecnológicos que tiene la Policía para enfrentar la criminalidad.