La reumatología, una especialidad poco conocida en el país

La reumatología, una especialidad poco conocida en el país

La gente piensa que lo que nuestros ancianos llaman “reumas” y complicaciones relacionadas con el diagnóstico del reumatismo es lo mismo, y que puede tratarlos de modo sencillo, con un médico general o con algunas de las alternativas que brinda la llamada medicina homeopática. Y no es así.

La reumatología es una especialidad que debe cumplir un riguroso programa con una duración entre 4 y 6 años, y que en el país apenas se ha iniciado la primera residencia en el Distrito Nacional, segunda en el país, en el hospital docente Padre Billini.

Un especialista en reumatología es lo que se llama, en el argot popular, una muela de gallina. En el país hay uno para cada 600 mil personas, aproximadamente, porque son alrededor de 18 reumatólogos para atender todas las complicaciones derivadas de las enfermedades inflamatorias crónicas que afectan el sistema muscular y esquelético.

La doctora Violeta Rosario Brito recién se instala en el país con especialidad en reumatología. Graduada de Medicina del Instituto Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), realizó su especialidad médica en Reumatología Clínica en el Hospital Clínic de Barcelona, donde realizó múltiples investigaciones en la Unidad de Inflamación, además de ejercer como jefa de residentes del último año de la especialidad. Conversamos con ella sobre algunas dudas que sabemos tiene la población dominicana.

¿Qué es la reumatología?. La reumatología es la rama de la medicina que trata las enfermedades inflamatorias crónicas que afectan al sistema musculoesquelético (osteoartritis, artritis reumatoide, espondiloartritis, miopatías), así como las enfermedades autoinmunes sistémicas (lupus, esclerosis sistémica, vasculitis).

¿Y los huesos? También. De la misma manera, diagnosticamos y tratamos las enfermedades relacionadas al metabolismo del calcio en el hueso que no son quirúrgicas (osteoporosis, hiperparatiroidismo, enfermedad de Paget, osteomalacia, entre otras).

¿Cuándo es necesario un reumatólogo? Debido a que las enfermedades que se relacionan a la reumatología usualmente conllevan tanto la afectación de órganos importantes en el cuerpo, como el riñón en el lupus, el pulmón en la esclerosis sistémica, el sistema cardiovascular en la artritis reumatoide, como a secuelas crónicas, se debe buscar la atención temprana del especialista para evitar estos daños.

¿Es lo mismo la osteoporosis que la artrosis? Tanto la osteoporosis como la artrosis se asocian a personas de edad avanzada, razón por la cual son confundidas en muchas ocasiones.

No tienen nada que ver, la osteoporosis es la pérdida de calcio en el hueso relacionada habitualmente a la disminución de los estrógenos o menopausia. No duele, es asintomática hasta que se produce una fractura ósea, que es la complicación más temida.

Por el contrario, la artrosis u osteoartritis se produce por un desgaste de la articulación en relación con la edad avanzada y con la actividad de la persona. Las personas que trabajan en construcción, con maquinarias pesadas, modistas o sastres, suelen sufrir desgaste precozmente. El signo predominante es el dolor y en algunos casos inflamación articular discreta.

¿Cuál es la diferencia entre la artritis y la artrosis? A la artritis popularmente se le asigna el nombre de reumatismo, sin diferenciarla de la artrosis.

La artritis es la inflamación, con dolor y, habitualmente, derrame articular (presencia de líquido en la articulación) en las articulaciones o coyunturas, que suele tener relación a una enfermedad de base, ya sea una infección, una enfermedad inflamatoria crónica o autoinmune (artritis reumatoide, lupus), enfermedades por depósito de cristales como la gota (presencia de ácido úrico en las articulaciones por la elevación del mismo en la sangre), o en casos raros, un proceso neoplásico.

Generalmente se necesita un tratamiento crónico que si no se realiza es cuando suelen producir secuelas.

La artrosis, al tratarse de un proceso de desgaste del cartílago articular, el tratamiento es para el dolor, dado que no es reversible ni se puede evitar, más que con medidas generales como ejercicios, buena higiene postural, pérdida de peso y en algunos casos rehabilitación física.

¿Qué es una infiltración? La infiltración articular es un procedimiento invasivo. Se trata de introducir una aguja, con jeringa, en la articulación afectada y administrar el tratamiento directamente en la misma. No se puede confundir con la artrocentesis que es sacar líquido articular de la articulación cuando está hinchada.

Generalmente se realizan las dos juntas, si hay una articulación inflamada se saca el líquido primero y luego se realiza la administración del medicamento dentro de la articulación, para mejorar tanto el dolor como la inflamación.

¿Cuál es la diferencia entre la osteopenia y la osteoporosis? La densidad mineral ósea (cantidad de calcio que se encuentra en los huesos) se clasifica en tres estadios, la densidad ósea normal, osteopenia (primer grado de pérdida de calcio del hueso) y la osteoporosis, que es el último estadio, y el que tiene indicación de tratamiento.

La osteopenia, si no existen factores de riesgo de fracturas: como fumar, bajo peso, menopausia, riesgo de caídas, antecedentes familiares de fractura de fémur, antecedentes personales de fracturas no traumáticas (fracturas que ocurren sin un accidente importante como accidente de vehículo o caída por las escaleras) no necesita tratamiento más que una buena prevención con correcta ingesta de calcio y vitamina D, y seguimiento cada dos años. La osteoporosis, sí se trata, existen distintos tratamientos, orales, subcutáneos y endovenosos, y se realizan seguimientos anuales o cada seis meses, dependiendo de cada paciente.

¿Qué es la artritis reumatoide? La artritis reumatoide es una enfermedad inflamatoria crónica de causa desconocida con afectación predominante en las articulaciones de las manos, aunque puede afectar cualquier articulación y cualquier órgano en el cuerpo. Afecta un 1-2% de la población general.

Es una enfermedad que si se diagnostica y se trata a tiempo, se puede evitar la secuela más temida que es la deformidad articular irreversible y la gran limitación a que esto conlleva.

El tratamiento es crónico, pero se puede lograr que el paciente haga una vida normal, si se diagnostica a tiempo.

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