La situación financiera del sector eléctrico continúa con su derrotero de agravamiento ya que la deuda corriente, a más de 30 días con los generadores privados, excluyendo Monterío y Laesa, sufrió un aumento de US$49.32 millones del 19 al 26 de noviembre del 2010, según los datos publicados por la Asociación Dominicana de la Industria Electrica (ADIE) que se muestran en el  cuadro.

Los US$49.32 millones representan un aumento de 19.76% con relación a la deuda corriente mayor de 30 días prevaleciente al 19 de noviembre del 2010. La deuda corriente real del sector eléctrico es mucho mayor, ya que hay que añadir las deudas con los generadores privados LAESA, Monterío y con la Empresa Generadora Hidroeléctrica Dominicana (EGEHID) de propiedad estatal.

Los datos anteriores muestran un deterioro progresivo e incremento en la deuda corriente a más de 61 días, ya que la misma aumentó en US$51.94 millones en tan solo una semana, representando un incremento de un 40.18% con relación a la deuda corriente a más de 61 días que existía el 19 de noviembre.

El agravamiento de la crisis financiera del sector eléctrico coincide con prácticamente dos meses de gestión de los administradores extranjeros al frente de las distribuidoras.

La carta de intención con el Fondo Monetario Internacional (FMI) establece que no debe existir deuda corriente a más de 60 días con los generadores privados, por lo que significa que esta parte del acuerdo se sigue violando por parte de las autoridades del sector eléctrico.

El deterioro financiero del sector eléctrico nacional luce que ha sido el detonante para que el Gobierno, a través de la Superintendencia de Electricidad (SIE), dispusiera de un aumento abusivo e injustificable en la tarifa eléctrica de un 11%, un alza de la tarifa que penaliza a los que pagamos por un servicio pésimo y caro, para cubrir las ineficiencias, mala gestión, exceso de empleomanía y exceso de gastos corrientes de las empresas distribuidoras y la CDEEE.