Estos alimentos son únicos y aportan distintos nutrientes al cuerpo de los seres humanos, por lo que uno no es intercambiable con el otro. La clave de tener una dieta balanceada está en la variedad de los alimentos, y en la regulación de las cantidades. Esto quiere decir que nadie puede comer todos los días únicamente un alimento, porque tendrá deficiencias de las propiedades de los demás alimentos.

La carne de pollo es uno de los alimentos más importantes en la dieta de los seres humanos, perteneciendo al grupo de las carnes, las cuales aportan proteínas al cuerpo. Un plato saludable, que debe estar incluido en la dieta diaria de las personas. La porción adecuada de carne (proteína) en un plato de comida de una persona que coma saludable debe ocupar al menos el 15%.

Una de las cualidades más importantes de la carne de pollo es que es fácil de digerir, rinde mucho y es fácil de combinar con otros alimentos. Además, es rica en proteínas y minerales esenciales como calcio, fósforo, hierro, zinc, sodio y potasio; así como vitaminas A, B1, B2, B3, y ácido fólico, que son ideales para el buen funcionamiento cerebral.

Las sardinas enlatadas en salsa roja, conocidas como “pica pica”, son un pescado azul que constituyen una buena fuente de omega 3, y ayuda a disminuir los niveles de colesterol. Además, aumenta la fluidez de la sangre, por lo que son recomendables para personas con enfermedades cardiovasculares. Las sardinas también aportan calcio, fósforo, proteínas (en un 17%) y vitaminas del grupo B, como la B1 y la B12, que ayudan a absorber y aprovechar los nutrientes energéticos como los carbohidratos, grasas y las proteínas.