EFE
REPORTAJE
El interés de la industria audiovisual en las redes se ha puesto de manifiesto en la reciente feria MIPTV de Cannes (Francia), el más importante evento internacional en este campo, donde se han comercializado en el mismo paquete los formatos y los recursos necesarios para que se conviertan en “virales” en las redes.
“Los fans y las audiencias tienen un papel cada vez más importante en la industria del entretenimiento, por su capacidad para influir en el éxito de los contenidos. Su poder se ve amplificado por las nuevas redes sociales”, señaló a Efe Laurine Garaude, directora de televisión de Reed Midem, empresa organizadora del MIPTV de Cannes.
Aunque lo fundamental siguen siendo “las buenas historias”, como apuntó Garaude, la tecnología es importante porque da poder a la audiencia y permite crear mejor contenido.
Lo cierto es que la fusión internet y televisión cada vez toma más vuelo y, tras la expansión internacional de plataformas como Netflix, gigantes del medio como Amazon o Microsfot se suman a la producción televisiva, y además, de forma interactiva.
Por ejemplo, Amazon -que produce la primera serie de televisión de Woody Allen- ha optado por mostrar capítulos piloto de series para que la audiencia los evalúe y decidir con estos datos cuál va a producir.
Por su lado, el gigante de la distribución audiovisual en internet Netflix se sirve de algoritmos para diseñar anticipadamente aspectos de sus contenidos en función de lo que vayan a pedir las audiencias.
Viralizarse o morir. Ese es el dilema de la nueva televisión, una vez demostrado que cada vez más público, joven y adulto, mira la pequeña pantalla con ojos y manos puestos en las redes sociales. De ahí que los programas se inspiren cada vez más en Internet para conseguir mayores audiencias.
Por ejemplo, el concurso de talentos noruego “The Stream”, en el que tres discográficas escogerán un nuevo ídolo internacional en función del número de escuchas que cada candidato logre en la plataforma musical Spotify.
La supervivencia está de moda. Las redes también son fundamentales en el “reality” de supervivencia “Stupid Man, Smart Phone” de la BBC británica, en el que un grupo de famosos demuestran su capacidad para sobrevivir en parajes inhóspitos, con la única ayuda de su teléfono celular. El programa muestra el buen momento que atraviesan los programas de supervivencia -en formato de concursos, telerrealidad o documental- que recurren a planteamientos cada vez más imaginativos, como la realidad carcelaria.
Para Virginia Mouseler, cofundadora de la empresa líder de tendencias del sector The Wit, que elabora la lista de novedades de más prestigio en el mundo televisivo, la capacidad para llegar al público de forma masiva o viral será “vital” para la supervivencia de los formatos. Y en esa lista continúa figurando la serie española “El Ministerio del Tiempo”, que tras ser vendida en Estados Unidos, Portugal y América Latina, se convertirá en la primera serie de ficción española en ser adaptada en China. Además, “El Ministerio del Tiempo” -que narra las peripecias de una patrulla de funcionarios que viaja al pasado para evitar hechos que trastocarían el curso de la historia- se ha situado a la vanguardia de la innovación mundial, al integrar por primera vez la realidad virtual como parte del universo narrativo de una serie en el mundo.