La tisana de la abuela, el remedio casero más infalible

La tisana de la abuela, el remedio casero más infalible

Las tisanas de hierbas son infusiones que se preparan con fines nutricionales o medicinales. Para hacerlas se usan las flores, frutos o raíces de diferentes plantas medicinales o con propiedades beneficiosas para la salud.

Aunque se las conoce como tés de hierbas, en realidad difieren de los tés tradicionales, que están hechos con las hojas de las plantas. Las tisanas de hierbas suelen ser usadas en medicina natural para aprovechar sus efectos sedantes, estimulantes, relajantes o terapéuticos.

Las tisanas preparadas por las abuelas son un clásico de cada familia. Y es que los remedios de las abuelas son recetas “mágicas” dotadas de una sabiduría milenaria que se sostiene a lo largo del tiempo, acompañada con la nostalgia y ternura que nos despierta la más anciana de los nuestros.

El avance de la medicina, hoy en día ha permitido comprobar en muchos casos que esos “remedios caseros” que abuela creaba y nos aplicaba con éxito, tienen explicación y respaldo científico.

Ejemplos de ello son el tilo y la manzanilla, que tranquilizan. Estudios científicos explican que tanto en la flor del tilo como en la manzanilla se encuentra un compuesto llamado farnesol, que produce una leve sedación en el cerebro.

Recetas

Tisana de manzanilla

1 litro de agua
2 cucharadas generosas de flores de manzanilla secas (algo más si son frescas)

Endulzante de tu preferencia al gusto (opcional)

Preparación. Para preparar una buena tisana de manzanilla no tienes más que seguir los clásicos pasos de la infusión. Calienta el agua hasta que llegue casi a punto de ebullición. Al tratarse de una flor algo delicada, el exceso de hervor no le sienta del todo bien. Simplemente tápala en una tetera o cacerola, déjala reposar unos cinco minutos y luego sírvela. Puedes endulzar con miel, azúcar de caña o algún endulzante no calórico, si estás a dieta. Si lo prefieres, no la endulces, pues de todos modos es riquísima.

Tisana de lavanda

1 cucharadita de lavanda
1 taza de agua

Preparación. Hierve en un cazo la taza de agua. Antes de que empiece a hervir (justo cuando entre en ebullición), añade la cucharadita de lavanda y deja hirviendo por unos tres minutos. Pasado este tiempo, apaga el fuego, tapa y deja en reposo cinco minutos. Finalmente cuela y disfrútala. Esta tisana ayuda a conseguir el sueño. Puedes tomar dos o tres tazas de tisana de lavanda, hasta que observes que consigues dormir mejor, o bien notes que los síntomas de estrés, ansiedad o depresión disminuyen.

Tisana de menta

5 hojas de menta
1 taza de agua

Preparación. Calienta el agua justo hasta que empiece a hervir. Apaga el fuego, y añade las hojas de menta. Tápala y déjala en reposo durante tres minutos. Puedes añadir un poco de miel o azúcar al gusto para endulzar un poco esta bebida.
Tisana de jengibre

1 o 2 cucharadas de miel pura
3 rodajas de raíz de jengibre de dos centímetros o un sobrecito de jengibre seco granulado.
1/2 naranja exprimida
1/2 limón exprimido.

Preparación. Lavar y pelar un trozo de raíz y cortarle dos o tres rodajas. Colocarlos en la taza y aplastarlos un poco con un tenedor (no demasiado). Agregar una buena cucharada de miel de abeja sólida, solo centrifugada. Añadir el jugo de media naranja y medio limón. Poner agua al fuego y cuando hierve agregarla a la taza y tapar. Dejar tapada unos diez minutos o más y servir. Si le resulta muy picante pruebe hacer la infusión sin aplastar los trozos con el tenedor o simplemente agregue más agua caliente una vez listo.

Tisana de masala

2 clavos de olor

6 semillas de cardamomo
6 granos de pimienta entera
1 trozo de canela grande
1/2 dedo de jengibre picado fino

Preparación. En una olla con tapa poner tres tazas de agua junto con todos los ingredientes. Dejar hervir por cinco minutos. Colar y servir. Si quieres puedes añadir leche.

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