Si bien es posible y hasta útil realizar el pago mínimo cuando surgen gastos inesperados, es importante que esto no se convierta en una práctica habitual ya que puede provocar una dependencia financiera no deseada con los bancos.
Aquellas personas que no sean cuidadosas con sus finanzas pueden caer en una deuda que sentirán como eterna, -por lo difícil de eliminar- e incluso porque puede aumentar con el paso de los meses. La financiación de los consumos con tarjeta de crédito a través del pago mínimo es sólo un negocio para el banco.
El pago mínimo es mucho más costoso que un préstamo personal. En muchos casos supone intereses sobre el saldo de deuda superiores al 60% y 70% anual.
¿Cómo se compone el Pago Mínimo?
El monto del pago mínimo no es fijo como las cuotas de un préstamo personal. Eso tiene implicancias desfavorables a la hora de planificar las finanzas de manera ordenada, ya que la amplia mayoría de las personas prefieren realizar cuotas iguales todos los meses.
Si bien cada entidad tiene su propia forma de cálculo, el pago mínimo representa alrededor del 5% del saldo de deuda y la totalidad de todos los gastos no financiables, como los costos administrativos o cuotas anuales, intereses, cargos por mora, comisiones, impuestos, adelantos en efectivo y las cuotas de las compras.
El monto mínimo a pagar, entonces, está compuesto en mayor parte por intereses, comisiones e impuestos y no por pagos que reduzcan el capital inicial que se está financiando. Abonando el pago mínimo cada 30 días, la deuda original no se reducirá.
Además, esta forma de financiamiento, es mucho más costosa que los préstamos personales por lo cual supone en muchos casos intereses sobre el saldo de deuda superiores al 60% y 70% anual.
Lee más: El truco para usar tu tarjeta de crédito y extender la fecha de pago
Se paga el mínimo pero la deuda no se reduce
¿Por qué? Esto sucede porque los bancos definen el pago mínimo para cubrir los intereses y no la deuda en cuestión.
Al cabo de 6, abonando $14.257 en concepto de pago mínimo, la deuda sólo habrá disminuido $4.822
Por ejemplo, sobre una deuda inicial de $50.000 en la que se efectúa el pago mínimo mensual, hay que adicionar el monto correspondiente a los intereses sobre el saldo adeudado.
Al cabo de 6 meses, se habrá abonado $14.257 en concepto de pago mínimo, pero la deuda sólo habrá disminuido $4.822.
Eso sin contar que al continuar usando la tarjeta para consumos habituales, se comienza a desordenar la vida financiera, corriendo riesgos de morosidad que complicarían el futuro al quedar atrasos registrados en Veraz.
¿Cómo resolver el problema de la eterna deuda?
Una de las soluciones para saldar en un solo pago el total de la deuda, es recurrir a otras alternativas de financiación que permitan reemplazar esa deuda, por una más económica. Los bancos no suelen otorgar créditos para pagar el 100% de la totalidad de las tarjetas porque «temen» que la persona se vuelva a endeudar y convertirse así, es un cliente «riesgoso».
Lo recomendado por los especialistas es saldar el total de la deuda en un sólo pago con un préstamo a menor tasa, con cuotas fijas y a un plazo más largo para bajar el impacto de los pagos en las finanzas y evitar el efecto «bola de nieve».
Los créditos personales en cuotas fijas suelen ser una buena opción. «Hoy el 20% de los créditos que se solicitan online, corresponden a la consolidación de deudas para eliminar el compromiso con el banco y bajar los elevados costos de la financiación en tarjetas de crédito», explica Alejandro Cosentino, CEO de Afluenta.
Existe un gran abanico de ofertas en esta materia, pero no todas cuentan con Costos Financieros Totales competitivos que puedan reducir los gastos que se trasladan al solicitante del crédito.
La llegada de las Finanzas Colaborativas al país ha permitido combinar innovación, tecnología y costos accesibles logrando una alternativa segura y novedosa para obtener prestamos personales rápidos a una tasa más conveniente que la que ofrecen los bancos.