La Universidad Católica Santo Domingo realizó anoche su octogésima primera graduación ordinaria, donde invistió 310 nuevos profesionales del nivel de postgrado, acto en el que el rector de la academia monseñor Jesús Castro Marte, alertó sobre el grave deterioro que sufre el medio ambiente, por la desconsiderada e indiscriminada explotación de la naturaleza.
La investidura fue realizada en la Casa San Pablo, en la Capital y fue encabezada por monseñor Francisco Ozoria Acosta, Arzobispo Metropolitano de Santo Domingo y estuvieron presentes además monseñor Julio César Corniel Amaro, obispo de la Diócesis de Puerto Plata y otras autoridades educativas y académicas.
Al pronunciar el discurso central, Castro Marte, también Obispo Auxiliar de Santo Domingo Norte, dijo que esa situación de deterioro ocurre en todo el planeta, lo que provocó que en ‘ la carta encíclica Laudato Si’ el Papa Francisco elevara un ferviente clamor por el daño que los seres humanos han infringido a la Tierra.
“Llama nuestra atención el uso irresponsable de los bienes que Dios ha puesto en ella. Por desgracia, los hombres han volcado la violencia que tienen en sus corazones contra el suelo que los acoge, sobre el aire que respiran y el agua que los sustenta”, expresó.
El religioso exhortó a los graduandos prepararse para ayudar a la solución de los graves problemas que aquejan a la nación, en especial la falta de oportunidades para alcanzar un verdadero desarrollo humano, para reducir la desigualdad social y para que los hombres tengan mayor dignidad como hijos de Dios.
Los graduados son de la especialidad en Docencia Universitaria, maestría en Formación Integral Humana y Religiosa, Especialidad en Metodología de la Investigación y maestría en Docencia y Gestión Universitaria. También de la maestría en Planificación y Gestión de la Educación, maestría en Gerencia Moderna, maestría en Ciencias Políticas y especialidad Gerencia Moderna de la Salud, entre otras.