República Dominicana, al igual que otros países, debe cambiar su modelo económico por uno que permita mayores acciones frente al cambio climático, tomando en cuenta su gran vulnerabilidad como isla.

Eso significa cambiar como organiza la economía y moverse a modelos como la economía circular o la eficiencia de los recursos, instó Pascal Delisle, asesor sobre el cambio climático, economía y división mundial del Servicio de Acción Externa de la Unión Europea (EEAS, por siglas en inglés).

“Hay una necesidad importante de cambiar el modelo económico y eso significa abordar temas como los precios. Porque se consume y se produce según los precios y si estos no reflejan el valor de las cosas en tema ecológico, puedes tener todo el dinero que quieras, si es más barato votar plástico vas a seguir con eso”, expresó Delisle durante un encuentro con periodistas dominicanos y brasileños en las oficinas centrales de la Unión Europea en Bruselas.

Delisle afirmó que todos los países pueden tomar acciones locales para enfrentar el cambio climático sin importar los recursos que manejen.

Resaltó que se deben adoptar estrategias locales como el planeamiento urbano, en temas como dónde se debe construir, diseño y normas para la construcción de viviendas o el diseño de infraestructuras de comunicación o electricidad.

Consideró que se debe introducir cambios en la manera en la cual se hacen políticas públicas que sean sostenibles y con normas de construcción fuertes.
“Esos son temas que se hacen localmente, es decir, que no se necesita apoyo de otros o financiamiento para hacer eso”, indicó.

Agregó que la Unión Europea está convencida de que hay que aportar recursos financieros para apoyar acciones frente al cambio climático, así como apoyar con recursos humanos e intercambio de experiencias.

Indicó que la Unión Europea provee más de la mitad del apoyo a nivel mundial en materia de financiamiento para el cambio climático. Haití es un ejemplo que recibe mucho apoyo, señaló Delisle.