BRUSELAS.-La Unión Europea abogó este viernes por permanecer «unida» tras la decisión de los británicos de salir del bloque e instó a Londres a iniciar «lo antes posible» el proceso de ruptura «sin importar cuán doloroso pueda ser».
Tomar nota de las lecciones y mirar hacia adelante es en suma la actitud que adoptaron los responsables europeos tras conocerse el resultado del referendo en Gran Bretaña, que sin embargo lo considean como una «bofetada» al proyecto de integración, «un golpe contra Europa» que ahora debe «concentrarse en lo esencial».
«Es un momento histórico, pero seguramente no es un momento para reacciones histéricas», dijo el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, uno de los primeros en reaccionar.
La UE está «determinada a mantener su unidad con 27», aseguró, y no habrá un «vacío jurídico hasta que Reino Unido abandone formalmente la UE».
La elección de los británicos «es un golpe contra Europa y el proceso de unificación», dijo por su parte la canciller alemana, Angela Merkel, pidiendo que no se saquen conclusiones «rápidas y simplistas».
Tras la «bofetada», la UE busca mantenerse unida y preparar los próximos pasos.
El presidente francés, François Hollande, pidió «concentrarse en lo esencial». El lunes viajará a Berlín para reunirse con Merkel, el premier italiano, Matteo Renzi, y Tusk.
Que salga ‘lo antes posible’ –
Juncker leyó un comunicado común firmado por Tusk, el presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, y el primer ministro holandés, Mark Rutte, cuyo país ocupa la presidencia semestral de la UE.
En él instaron al Gobierno británico a hacer, «lo antes posible», «efectiva la decisión de los británicos (…) sin importar cuán doloroso pueda ser ese proceso» de ruptura con la UE.
«Estamos listos para lanzar las negociaciones rápidamente con Reino Unido», escribieron Juncker, Tusk, Schulz y Rutte.
Los tratados europeos estipulan que el proceso de salida puede comenzar en cuanto el Estado miembro que desee separarse lo pida a los otros países del bloque.
David Cameron anunció que abandonará el cargo en octubre, afirmando que el país necesita un líder nuevo para llevar a cabo las negociaciones de ruptura.
El líder de los conservadores en el Parlamento Europeo, Manfred Weber, insistió este viernes por la mañana en que «comiencen inmediatamente» las negociaciones.
El tema será tratado la próxima semana, el 28 y 29, en una cumbre Bruselas. Antes, el sábado, los ministros de Relaciones Exteriores de los países fundadores de la Unión, Alemania, Francia, Italia, Bélgica, Luxemburgo y Holanda, se reunirán en Berlín.
Evitar una ‘reacción en cadena’
La decisión de los británicos hundió a Europa en la incertidumbre y da fuelle a los euroescépticos y extremistas, que ya reclaman, como en Francia Marine Le Pen o en Holanda Geert Wilders, la organización de referendos sobre la permanencia de sus países en el bloque.
«La reacción en cadena que los euroescépticos celebran ahora un poco por todas partes no se producirá», sentenció Martin Schulz.
El voto provocó además entre los responsables políticos europeos una reivindicación a atender las lecciones de este revés.
Es una «bofetada al proyecto europeo», resumió el primer ministro belga, Charles Michel, que pidió no ceder al «pánico» y fríamente «encontrar muy rápido el camino para sacar el proyecto europeo adelante».
Para España, la prioridad ahora es «acercar la acción de la UE a las necesidades de los ciudadanos».
«Pese a contratiempos serios como el que hoy enfrentamos, que nadie dude de que vamos a seguir trabajando en la construcción del mañana», afirmó el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, a dos días de las elecciones generales en España.
El checo Bohuslav Sobotka estimó, por su parte, que la Unión no está amenazada. Pero debe «cambiar rápidamente», ser «más flexible, menos burocrática» porque el «proyecto europeo necesita tener mucho más apoyo de los ciudadanos».
Rutte indicó que el «decepcionante» resultado del referéndum británico debe ser «una incitación para reformar la Unión Europea».
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, declaró que esperaba que la UE «continúe siendo un socio sólido de las Naciones Unidas» y que Reino Unido, que es miembro permanente del Consejo de Seguridad, mantenga su liderazgo.
Para la OTAN, «Reino Unido seguirá siendo un sólido y comprometido aliado».
El papa Francisco exhortó en tanto a la «responsabilidad» de Europa para garantizar la «convivencia».