La verdad también se mide en metros

La verdad también se mide en metros

POR DONALD ROWLAND
«No digamos jamás la mentira, no engañemos a nuestros papás, que no hay cosa más bella que un niño cuando sabe decir la verdad». El presente estribillo, tomado de la hermosa pieza infantil «Canto a la verdad», servía como base a las clases de moral y cívica que se impartía en las escuelas del país hace algunas décadas, con el propósito de inculcar en los menores el valor que encierra el ejercicio de la veracidad en sus vidas.

Con el arribo de la modernidad y la introducción de la práctica de las relaciones públicas, llegaron las comunicaciones estratégicas y de imagen con una mal entendida y peor aplicada concepción, en donde muchos hacen uso del maquiavélico principio de que «el fin justifica los medios».

Sobre esa base los gobiernos en casi todo el mundo se han dedicado a la desinformación, cuando no a la promoción de medias verdades que, en muchos casos, alcanzan a convencer a las masas de brindar su apoyo a planes y proyectos que en el largo plazo se revierten en mayores dificultades para éstas.

El ejemplo más claro de lo afirmado previamente se verifica con las políticas adoptadas por el Presidente George Bush durante todo el tiempo de su mandado al frente del gobierno norteamericano. En su último propósito de cambiar la seguridad social de su país ha encontrado a críticos como el pastor Harry C. Kiely, de la Iglesia Metodista Unida, quien después de recordar la famosa frase del genio Alemán de las comunicaciones Joseph Goebbels, de que «una mentira repetida frecuentemente llega a ser aceptada como verdad», se pregunta ¿cuántas veces más se saldrá con la suya el Presidente Bush gritando ahí viene el lobo?

El pastor Kiely recuerda que primero fueron «las armas de destrucción masiva.» El Congreso le creyó y comprometió a la nación en una trágica guerra en Iraq, basados en mentiras y decepciones. Luego los recortes masivos de impuestos a los ricos, con la garantía de que movería la economía de nuevo. ¿El resultado? El excedente presupuestario fue cambiado por un gigantesco déficit que será traspasado a sus nietos.

Ahora le toca a la Seguridad Social. El sistema completo camina hacia la bancarrota, dice el Presidente, por lo que se hace necesario tomar pasos radicales para rescatarlo. El pastor Kiely afirma, sin embargo, que el Seguro Social no sólo no está en riesgo, sino que está de hecho saludable y robusto, según lo afirma el organismo Fideicomisario no partidista, quien asegura que los fondos de Seguridad Social pueden pagar todos los beneficios más allá del 2042 y la Oficina de Presupuesto del Congreso, también apartidista, va más allá y extiende la solvencia hasta el 2052.

Detrás de este esfuerzo hay planteada toda una campaña de comunicación y relaciones públicas en apoyo a la misión que se ha impuesto el presidente de los Estados Unidos.

En el terreno local, por otra parte, y parece que siguiendo el patrón de modernidad señalado por la metropoli, tenemos en marcha una ciclópea labor de relaciones públicas que persigue ablandar la resistencia de la opinión pública ante el propósito de llevar a cabo la construcción del megaproyecto del Metro de la Capital, el cual, con apenas 10 kilómetros de longitud, se plantea como la solución a los enormes problemas del tránsito en la ciudad.

El designado promotor de la idea, ingeniero Diandino Peña, en su periplo por los medios de comunicación ha planteado, entre otros argumentos, que el proyecto costará «solamente» $326.69 millones de dólares, y que el costo del pasaje se ubica entre 5 y 10 pesos por pasajero.

Las experiencias vividas en proyectos anteriores, no obstante, indican que estas afirmaciones podrían ser ubicadas dentro de los parámetros de las medias verdades o al menos de mentiras piadosas, justificadas, únicamente, por la convicción que tiene la más alta instancia del gobierno de que su realización dejaría enormes ventajas y beneficios a los dominicanos.

TALENTO DOMINICANO RECORRE EL MUNDO DE LA PUBLICIDAD

El creciente reconocimiento al talento y a la calidad profesional del dominicano en tierras extranjeras está sirviendo como catalizador de la otra imagen que tradicionalmente se ha estado vendiendo, asociada a sus habilidades para dirigir o participar en actividades que van contra la ley, como son la drogadicción, el tráfico de estupefacientes, los viajes de indocumentados, entre otras.

El último capítulo de esta corriente de positivismo allende los mares se concretiza en el campo de la publicidad, con la participación de Mike Alfonseca como miembro de la dupla creativa que acaba de ganar el concurso para el manejo de la cuenta publicitaria a escala mundial de la compañía electrónica Samsung, que se espera invierta la suma de 400 millones de dólares en el transcurso del presente año.

La cuenta fue ganada mediante concurso por la agencia J. Walter Thompson, en Corea, y la elaboración de los conceptos y las ideas creativas de la campaña corrieron a cargo de la dupla formada por el Uruguayo Leandro Gómez Guerrero, de Corporación Thompson Uruguay, y Mike Alfonseca, de JWT República Dominicana.

Después de que los representantes de WPP quedaron seleccionados en una ronda preliminar, JWT y Berlin Cameron / Red Cell invitaron a creativos de diferentes países (Inglaterra, Francia, Italia, España, Brasil, Uruguay y República Dominicana) a Nueva York, para que «compitieran» entre sí en la creación de conceptos globales para la campaña y que, a partir de ahí, generaran guiones de TV e ideas gráficas.

De esa suerte de compulsa se seleccionarían tres «caminos» para instrumentar la comunicación de Samsung en diferentes partes del mundo. Al cabo de 15 días de trabajo, resultó que una de las tres ideas ganadoras surgió de la dupla que conformaron Leandro Gómez Guerrero, de Corporación Thompson (Uruguay) y Mike Alfonseca, de JWT República Dominicana. El otro país latinoamericano que había participado por JWT había sido Brasil.

Una vez más las ideas de Mike trascienden las limitadas fronteras de nuestra media isla caribeña.

d.rowlan@verizon.net.do

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