Aunque se suele pensar que la zanahoria solo es ideal para ensaladas o jugos, la verdad es que esta hortaliza se presta para una serie de preparaciones como platos fuertes, sopas, postres, sorbetes…
Y qué decir de las formas de cocinarla: al vapor, hervida, salteada, cruda, cocida, licuada o simplemente fresca y a bocados, la zanahoria es ideal para diversas preparaciones, debido a su versatilidad.
Este vegetal de intenso color naranja ofrece diversos beneficios para la salud, gracias a que aporta una gran cantidad de nutrientes necesarios.
La zanahoria es rica en betacarotenos y vitamina A; contiene también potasio, sodio, calcio, fósforo, magnesio, hierro, zinc, yodo y selenio.

Receta
Zanahorias picantes glaseadas

3 zanahorias grandes
3 cucharadas de mantequilla
1/2 taza de azúcar morena
1/2 cucharadita de chile en polvo
Sal y pimiento, al gusto
Perejil picado, al gusto, para decorar
Preparación. Pele las zanahorias y córtelas en diagonal. Hierva agua con sal en una olla y luego agréguele los trozos de zanahoria. Una vez que se ablanden, retire las zanahorias del fuego y resérvelas. En otra olla, derrita la mantequilla y añada el azúcar. Agregue el chile en polvo, la sal y la pimienta al gusto. Revisa el sazón y añada más condimento, si es necesario. Mezcle bien las zanahorias con el glaseado y sírvalas cuando estén bien cubiertas. Decore con el perejil finamente picado y sirve inmediatamente.

Croquetas de zanahoria

2 zanahorias
1 cebollín
1 pimentón rojo
5 cucharadas de harina de garbanzo
Pan Rallado
Aceite vegetal
Pimienta
Curry
Sal
Preparación. Rallar la zanahoria. Picar fino el cebollín y el pimiento rojo. Saltear estos ingredientes en una sartén con aceite. Condimentar con pimienta, curry y sal a gusto. Colocar la harina de garbanzo en un recipiente. Agregar agua y mezclar hasta obtener una consistencia similar a la de huevo batido. Con los vegetales salteados, formar pelotitas ovaladas. Una a una, pasarlas primero por la mezcla de harina de garbanzo y agua, y luego por pan rallado. Freir cada croqueta en aceite vegetal hasta que esté bien dorada. Si no quiere freír, puede colocarlas en una bandeja, rociarlas con un poco de aceite y cocinarlas en horno caliente. Al retirarlas del horno o la sartén, colóquelas sobre un papel absorbente para quitar el exceso de aceite.

Sopa de zanahoria y jengibre

4 zanahorias medianas lavadas y peladas, semicocidas
1 cucharadita de fécula de maíz
2 cucharaditas de jengibre fresco, pelado y finamente rallado
1 sobre de sustituto de azúcar
El jugo de una naranja
1/2 litro de consomé de pollo casero
Sal y pimienta blanca
Preparación. En una olla mediana, caliente la fécula, el sustituto de azúcar, el jengibre y el jugo de naranja hasta que espese y se caramelice ligeramente. Licue las zanahorias con el consomé de pollo y agrégala a la mezcla de jengibre. Sazona con sal y pimienta y listo.

Dulce con zanahoria

4 zanahorias medianas
1/4 taza de nueces picadas
1 taza de piña en almíbar
1/4 taza de pasas
1 taza de leche condensada.
1 taza de media crema
Preparación. Lavar muy bien las zanahorias para después pelar y rallar. Luego echar las zanahorias ralladas en un refractario y agregar las pasas, nueces, la piña (sin el almíbar). Posteriormente licuar la leche condensada junto con la media crema. Luego vaciar la leche sobre la preparación de zanahoria. Refrigerar solo hasta que se enfrié y servir.

Bombones de zanahoria y coco

2 tazas de zanahoria tierna
1 taza de agua
1/2 taza de azúcar
1/4 taza de zumo de naranja natural
1 cucharadita ralladura de piel de naranja
2 cucharadas soperas rasas maizena
Coco rallado para rebozar
Preparación. Lavar las zanahorias, pelarlas y cortarlas en aritos. Colocarlas en una cacerola junto con el agua y el azúcar. Poner al fuego y dejar cocer 15 minutos o hasta que las zanahorias estén tiernas. Retirar del fuego la zanahoria, escurrir el agua reservando un poco y batir junto con la ralladura, el zumo de naranja y la maizena. Si queda muy denso, añadir al batido un poco del agua de cocción. Colocar el puré otra vez en la olla y cocinar a fuego medio, sin parar de remover, hasta que quede una textura como la de las croquetas. Dejar enfriar la preparación, primero a temperatura ambiente y luego llevarla a la nevera un par de horas para que endurezca un poco y sea mas fácil de manejar. A continuación hacer bolitas del tamaño de una nuez pequeña y pasar por el coco rallado. Cuando tenga todas las bolitas, volver a meter en la nevera hasta la hora de servir.