La Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) manifestaron ayer que la lactancia materna, además de esencial para madres y crías, ayuda a disminuir el impacto económico que la pandemia ha provocado en las familias, máxime aquellas con poco acceso a compra de alimentos.
Las entidades indican que lactar disminuye el riesgo de desnutrición aguda en menores de cinco años.
A propósito de celebrarse la Semana Mundial de la Lactancia Materna 2020, las organizaciones exhortan a los gobiernos asesorar a las madres para que persistan en la práctica.
Los organismos internacionales señalan que la consejería puede garantizar que madres y familias reciban apoyo, la información, el acompañamiento y la tranquilidad que necesitan para alimentar a sus bebés de manera óptima.
“La lactancia proporciona a cada niño el mejor comienzo en la vida y ofrece beneficios para la salud nutricional y emocional de los infantes y sus madres.