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SANTIAGO DE CHILE (EFE).- El presidente de Chile, Ricardo Lagos, afirmó ayer que América Latina tiene una responsabilidad «ineludible» en Haití, donde se juegan valores como la solidaridad y la justicia.
«En Haití hay una responsabilidad que es tarea nuestra ineludible, de región, de América Latina. Si la región no sabe asumir sus propias crisis, otros de fuera actuarán allí», dijo el mandatario al destacar la misión de Naciones Unidas en Haití, que integran varios países latinoamericanos.
«Creemos que en cierto modo en Haití se están jugando muchos valores. Queremos un mundo con solidaridad, porque sin solidaridad las crisis, las injusticias y el caos se multiplican», recalcó Lagos.
El mandatario hizo esas declaraciones al despedir al representante y jefe de la misión de Naciones Unidas en Haití, el chileno Juan Gabriel Valdés, que el próximo 16 de agosto asumirá su cargo en Puerto Príncipe.
Argentina, Brasil, Chile, Paraguay, Perú y Uruguay forman parte de la misión de la Organización de las Naciones Unidas en Haití, denominada MINUSTAH, que a diciembre próximo estará integrada por 6.700 militares y agentes de seguridad.
Esos contingentes militares están bajo el comando del general brasileño Heleno Ribeiro Pereira.
En declaraciones a los periodistas, Lagos recordó que Chile envió en menos de 48 horas tropas a Haití para integrar la misión de mantenimiento de la paz, a pedido del Consejo de Seguridad de la ONU en marzo pasado.
«Un país también crece cuando pone ética a la política y lo que Chile está haciendo en consecuencia hoy es también una demostración ética de nuestra política exterior», indicó.
«Sabemos que la tarea allí es muy profunda» dijo y agregó que se trata de reconstruir un país, confianzas y forjar un futuro al tiempo que destacó el trabajo conjunto de las fuerzas armadas chilenas, brasileñas, ecuatorianas, argentinas y uruguayas.
El presidente socialista informó, además, que el lunes conversó con el jefe de Estado de Ecuador Lucio Gutiérrez «para concertar lo que va a ser la presencia de las tropas ecuatorianas conjuntamente con las chilenas en las tareas de reconstrucción de infraestructura a través de los cuerpos militares del trabajo».
Al despedir a Juan Gabriel Valdés, el mandatario dijo que aunque la misión del diplomático es difícil también es «una de las más esperanzadoras».
Lagos reiteró que el gobierno de Chile seguirá apoyando «a Naciones Unidas en su propósito y al pueblo haitiano en poder construir un futuro mejor».
Valdés, en tanto, agradeció el apoyo presidencial para la que definió «una tarea de enorme dificultad».
«Tenemos que hacer las cosas bien», dijo el diplomático, quien recordó que Haití ayudó a la independencia de Latinoamérica y resaltó que la región hoy le devuelve la mano al país caribeño que se independizó hace 200 años.
«Tenemos que hacer las cosas bien, que es restablecer la seguridad en el país, la paz, pero también dar apoyo para relanzar la economía, promover el desarrollo, custodiar los derechos humanos y organizar un proceso político que le permita a Haití tener un gobierno legítimo en un plazo breve», señaló Valdés.
Tras este encuentro con la prensa, Lagos y Valdés participaron en una reunión de trabajo sobre el papel de Chile en Haití con la participación de autoridades y funcionarios de distintos ministerios.
Valdés se hará cargo de la misión de la ONU en Haití un día antes del inicio de la visita a ese país de los presidentes de Brasil y Uruguay, Luiz Inácio Lula da Silva y Jorge Batlle, respectivamente. EFE
