POR RICARDO RODRIGUEZ R.
SANTIAGO.- El rector de la Universidad Abierta para Adultos (UAPA) lamentó que en el sistema educativo nacional existan aún las viejas prácticas de discriminación que, de acuerdo a su criterio, limitan el derecho a la educación de la población dominicana.
El doctor Ángel Hernández se refirió, de manera específica, a los haitianos que residen en el país que, según la autoridad universitaria, existe una población en edad escolar que tiene limitaciones para ser admitida a la escuela.
Hernández enfocó ese y otros aspectos de la educación dominicana, al pronunciar ayer el discurso central, en la XVIII graduación de la UAPA, celebrada en el Colegio Sagrado Corazón de Jesús, de esta ciudad, y donde recibieron sus diplomas 247 nuevos profesionales y 37 que hicieron post grado en maestría de legislación de tierras. Hernández dijo que en las estadísticas oficiales de la matrícula escolar, la población de origen extranjero no aparece registrada o lo está de manera marginal, aunque se conoce que la migración haitiana en el país ronda el millón de personas.
Recordó que en el pasado reciente se adoptó la disposición de inscribir a los niños en los centros educativos sin el acta de nacimiento medida que, a su juicio, permitió el acceso a nacionales y extranjeros que carecían de dicho documento.
Pero su efecto sólo les permitía avanzar en su escolaridad hasta los grados donde las pruebas nacionales son obligatorias y el derecho a la educación debe ser satisfecho durante toda la vida, puntualizó Hernández.
En otro sentido, el rector de la UAPA también criticó que sean expulsadas de las escuelas diurnas las jóvenes cuando salen embarazadas, catalogando esa práctica como discriminatoria contra la mujer y una violación al derecho a la educación.
Hernández hizo alusión a la resolución 2001/29 del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, en la que se condena dicha práctica y que recomienda tomar todas las medidas adecuadas, para suprimir los obstáculos que limitan el acceso a la educación, en especial de las niñas, incluidas las menores embarazadas y los niños que viven en zonas rurales.
Recientemente el director de un colegio me comentó alarmado que en un politécnico de la capital fueron expulsadas durante este año escolar 58 jóvenes por estar embarazadas, lo cual refleja la magnitud de este fenómeno en la escuela dominicana, informó.
Agregó que una educación sin discriminación es una educación para paz, la no violencia, la convivencia armónica y de comprensión entre las culturas.
Implementar la no discriminación en las escuelas supone una decisión política, ya que históricamente la cultura nacional se ha forjado sobre la base de los valores de la cultura del blanco, la hispanidad ha sido nuestro modelo, estimo el doctor Hernández.
A la graduación de la UAPA asistieron autoridades de otras universidades, así como el doctor Félix Llorente, catedrático de la Universidad Carlos III, de Madrid; José Goico, director ejecutivo de la Asociación Dominicana de Rectores Universitarios y el licenciado Pedro Diep, director regional de Educación.