Para Praida Montero poder abrir de nuevo su negocio,   luego de ser   afectado  por la crisis económica del 2008-2009,  ha sido toda una odisea. Y es que según explicó, el acceso al crédito para una pequeña y mediana empresa es muy difícil.

 Montero es propietaria de la fábrica de muebles Praida Decoraciones, la cual antes de cerrar, producto de la crisis,  empleaba a 22 personas. ahora luego de liberar una gran batalla para poder empezar de nuevo, ha podido reintegrar a unos 10 de sus antiguos empleados.

La industria del mueble explica que las piezas que fabrica en su mueblería no tienen nada que envidiarle a los importados, ya que son hechos con maderas preciosas, buena terminación y diseños modernos.

Sin embargo, explica que mantenerse en el mercado no ha sido nada fácil,  ya  que a pesar de la calidad de sus muebles la crisis económica que afectó al mundo durante el 2008 y parte del 2009 se llevó a su paso la mueblería.

“Tuve que cerrar, toqué muchas puertas para poder abrir nuevamente, pero en este país conseguir dinero para una pequeña y mediana empresa no es fácil”, comentó  Montero.

Explicó  que fueron muchas las puertas que tocó para conseguir financiamiento y abrir la mueblería nuevamente.

Citó  entre una de ellas la del  Consejo Nacional de Promoción y Apoyo a la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Promipyme).

 Agregó que de esa institución nunca recibió respuesta, lo que lamentó por ser  esa entidad la que debería dar apoyo a pequeños y medianos empresarios que quieren echar adelante sus negocios.

Dijo que gracias a personas que confiaron en su trayectoria ha podido volver abrir su mueblería.

Abogó porque el Gobierno, a través de las instituciones creadas para apoyar las pymes, sea más proactivo.

Consideró que de nada vale la creación de parques industriales para las pymes, como los que inauguró recientemente el Gobierno, tras argumentar que lo realmente necesario es destinar recursos que lleguen  a través de prestamos.