Por MARIEN ARISTY C.
“Yo favorezco una sociedad en la no que tenga que haber ningún tipo de fondo para asistencialismo”, dijo ayer el presidente de la Cámara de Diputados, Julio César Valentín, al ser cuestionado en torno al fondo especial que entrega el Senado de la República a los legisladores para que inviertan en proyectos de salud, educación y bienestar social.

Tras advertir que esta práctica siempre se ha dado en el Senado, Valentín entiende que esto sucede porque existe una carencia de satisfacción de las necesidades básicas de los ciudadanos, razón por la que muchas veces los políticos tienen que darle una respuesta individual a muchos problemas. Pero este mecanismo, advierte Valentín, favorece prácticas corruptas.

Sin ánimo de enjuiciar lo que hace el Senado, o establecer que  los senadores le den mal uso a los fondos, Valentín lamentó que este tipo de práctica sea parte del sistema político dominicano. Por ello, propugna por cambiar radicalmente el modelo político que se usa en el país.

Para ello, sin embargo, debe haber un consenso entre los líderes de los tres principales partidos políticos de manera que puedan sentarse a conversar y firmar un acuerdo en todos los ámbitos de la vida nacional, según Valentín.

El primer asunto que deben discutir y concertar, propone, es el de las elecciones separadas puesto que el realizar elecciones tan constantes sólo sirve para que el país esté inmerso en pugnas eternas.

 Pero dicho acuerdo también debe incluir todo lo que tiene que ver con la situación fiscal, la unificación de las elecciones y las contrataciones en las instituciones del Estado, que debe ser por concursos y en función de las capacidades.

De esta forma se evitará que los puestos sean un botín partidista y se acabará con una de las peores barbaries que tiene la República Dominicana: el clientelismo. Pero este clientelismo, subraya, se  sustenta en la falta de educación que tiene la gente.

Después de advertir que la gente no tiene la culpa de ello, Valentín señaló que es necesario que haya una política consistente para erradicar el analfabetismo y educar al pueblo con calidad.