La policía de Tampa radicó hoy cargos contra el lesionado lanzador de los Yankees de Nueva York Michael Pineda por conducir un vehículo de motor bajo los efectos del alcohol.

El nivel del alcohol en la sangre de Pineda fue calculado en .128, muy por encima del límite legal del estado de Florida que es .08.

Este es el episodio más reciente en la racha de problemas de Pineda en este año, tras haber sido la contratación más grande de los Yankees en el invierno pasado. No ha podido jugar en la presente temporada por haber sufrido una cirugía de hombro.

El lunes, Pineda fue detenido a las 2:35 a.m. y, de acuerdo con el reporte de la policía, «no tenía encendidas las luces delanteras del auto». El reporte establece además que el oficial que lo detuvo pudo «distinguir un olor de una bebida alcohólica que provenía del aliento del detenido y que su hablar era incoherente».

Pineda, de 23 años, fue la principal adquisición en un cambio de cuatro jugadores con los Marineros de Seattle que envió al cotizado prospecto Jesús Montero al oeste en enero.