Las “reservas” del negocio

Las “reservas” del negocio

Definitivamente, la pérdida de todo valor, de todo sentido de la ética y la decencia en que discurre el sistema de partidos de este país está provocando su descalabro.

De esta circunstancia, lo lamentable no es el descalabro en sí, sino que la forma y contenido en como éste se está produciendo se lleva consigo el atributo más importante que pueda tener una sociedad para su desarrollo económico, político y social: la confianza en su futuro y la auto estima en tanto colectividad.

Una expresión escandalosa de esa falta de ética, y de abuso, es el llamado recurso a la “reserva” que se da el presidente de un determinado partido o de su comité político, para negociar candidaturas en determinadas demarcaciones, o puestos en un eventual gobierno nacional o municipal con posibles aliados o en muchos casos, de tránsfugas.

La figura de la “reserva” no solamente tiene ese significado, sino que su uso y abuso de parte de las cúpulas partidarias limita la libertad, la legitimidad y democratización de la representación de la militancia en las boletas electores para la elección de los candidatos a los puestos en las instituciones del Estado.

El hecho de que en el PRD, su presidente se reserve el derecho de disponer de cerca del 70% de las candidaturas a los diferentes puestos para el Congreso y los municipios y que el comité político del PLD se reserve la casi totalidad de las candidaturas para el Senado y la discresionalidad de un indeterminado número de candidaturas municipales, pone en evidencia carácter no democrático de la representación en el sistema político dominicano.

Plantea, además, al sistema electoral y a su Junta Central Electoral, la obligación de explicar el porqué es vinculante la elección de los candidatos a la Presidencia de la República a través de primaria y no necesariamente a los candidatos a senadores y a síndicos.

Debe explicar si esto no constituye una distorsión sobre la igualdad e importancia de los poderes del Estado.

Las “reservas” pueden servir, lo admito, para elegir a personas de mucho talento y talante que a veces la lógica de la política partidaria impide que se elijan, pero también sirven para todo lo contrario.

 Cierto Minou? Sirven básicamente para la compra de tránsfugas potenciales, pero al mismo tiempo contribuyen al descalabro de los partidos

El recurso al uso de la “reserva”, es un recurso no democrático para corregir la incapacidad de los partidos para eliminar esa lógica perversa e inexorable impuesta por su modelo de organización sustancialmente anti democrática que induce a escoger para los puestos más importantes a las personas de menor talento.

  Una lógica de selección tan anti democrática como ineficaz que no puede ser rota con métodos no democráticos.

El último y penoso caso de transfuguismo protagonizado por el diputado Rafael Calderón, potencia el negocio de las “reservas”, pero al mismo tiempo el descreimiento de la gente en las instituciones políticas y en la política, refuerza la percepción de que la democracia es un sistema ineficiente e ineficaz.

Eso es lo lamentable del caso.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas