Se iniciaron esta semana las reuniones del diálogo donde se debatirán las 12 reformas que planteó el presidente Luis Abinader en su más reciente discurso, que incluye una reforma Constitucional que permita fortalecer la Transparencia y la Institucionalidad; la del Sector Eléctrico; la del Agua; de la Policía Nacional; la Modernización del Estado; la Calidad Educativa; la Seguridad Social; el Transporte; la Transformación Digital; la Reforma Fiscal; la Laboral y la Reforma del Mercado de Hidrocarburos.
En la reunión del pasado lunes, estuvieron representados los partidos políticos, los empresarios y la clase sindical, y dio un buen punto de inicio para que se logren estas reformas que son muy importantes para el país.
De lograr ponerse de acuerdo y alcanzar que esta propuesta se materialice, estaríamos caminando a una mejor sociedad, que desea tener cambios notorios, y que empecemos a vernos como un país que busca mejorar como nación, donde el desarrollo sea de éxito para la población.
Nuestra cultura, como sociedad, debe ir haciendo transformaciones en nuestras maneras de pensar, y son los sectores que gobiernan el país que deben ejecutarlas; y con estas acciones el pueblo debe sumarse, empoderándose para hacer conciencia de que merecemos más.
La República Dominicana debe ser un país que merece más de sus clases políticas, de los sectores empresariales, sindicales y sociales, por eso valoramos la iniciativa del presidente Abinader, y la receptividad que ha encontrado.
Este importante paso nos da buena aura, pues muestra el desprendimiento de las clases dominantes y da una señal ante el pueblo que mira con alegría la unión de ellos en procura de una mejor sociedad, anhelada de grandes avances.
Tener una Policía moderna, una educación de calidad, un sistema sanitario con garantías, con una seguridad social para todos, ayudará a cambiar para mejor a toda la población que se siente abrumada por las situaciones que hoy vivimos, producto de la pandemia del COVID-19.
Estamos seguros de que la población, al igual que yo, vemos con beneplácito que se esté realizando este cónclave, el cual ayudara a cambiar el pensamiento y bajar la crispación que hoy nos invade.
Nuestro país necesita de mejores condiciones, y nuestras clases dominantes tienen en el presidente Luis Abinader la oportunidad para lograr estas reformas, pues su desprendimiento se traducirá a favor del pueblo.