Santiago.-Las alcantarillas rotas en todos lados de la ciudad constituyen un gran peligro para los transeúntes y ciudadanos que circulan en vehículos.
El problema con las alcantarillas de esta ciudad es de nunca acabar. Se puede constatar con solo realizar un pequeño recorrido por las calles que algunos de estos drenajes están obsoletos y su funcionalidad en realidad es nula.
Quienes viven, trabajan o pasan por los lugares más críticos donde están las alcantarillas expresaron preocupación por el peligro que representan para los transeúntes y los conductores de vehículos.
Además de que desencadenan, en tiempos de lluvias, como ahora, un posible brote de enfermedades por la contaminación que producen.
Preocupados por esta situación, que no es nueva, los moradores argumentan que la problemática es preocupante, porque la inseguridad se apodera de todos al caminar por aceras.
“Yo tengo que caminar por aquí, porque vengo regularmente al Hospedaje Yaque y siento mucho temor de pasar ya que el hoyo es muy grande y hay varillas, que es mucho más peligroso si me caigo”, dice Antonia Rivas.
“Hacemos un llamado a las autoridades municipales y regionales. Esta terrible situación representa un peligro mortal para quienes recorren el sector de día y en horas nocturnas y no conocen la zona”, sostiene.
Algunos ciudadanos consultados expresaron se han caído en las alcantarillas, con consecuencias de fracturas en las piernas o los brazos.
En adición a la situación descrita, desaprensivo se roban las tapas de los filtrantes, lo que también se suma al peligro que tienen que enfrentar los transeúntes y los conductores de vehículos.
Son muchas las calles, avenidas, y carreteras de esta provincia que tienen filtrantes sin tapas y que se convierten en peligros para las personas que cruzan de un lado a otro y que no advierten que pueden caerse dentro de ellos.
En innumerables ocasiones el Patronato Nacional de Ciegos se ha quejado de esta dificultad que pone en peligro la vida de los invidentes.
Agua y basura. Los santiagueros consultados señalaron que cuando llueve fuerte, la mayoría de las calles se llenan de agua porque las alcantarillas están llena de basura.
“Prácticamente estamos conviviendo con el agua sucia siempre, necesitamos que las autoridades correspondientes hagan algo y solucionen este inconveniente que tenemos los pobladores del sector cerca del Hospedaje Yaque”, manifestó Juan Pérez, un ciudadano preocupado por la situación que enfrenta Santiago.