«El generalísimo« tenía bienes e inmuebles con valores incalculables para la época y que en el presente no existe aún una valorización neta. Maderas preciosas en especial la caoba, árbol endémico; mármol importado, cerámicas de primera y chapas que eran de las más costosas y vistosas para un hombre muy ostentoso quien gozaba de regalos otorgados por diversos compañeros de la tiranía e instituciones tanto educativas como gubernativas de la época, más las apropiaciones de casas gozando de su autoridad como gobernante de la República Dominicana.

Según historiadores de la talla de Esmeraldo Augusto Bravo, son incontables las casas que a nivel nacional tenía el tirano, con más de veinte en la ciudad y algunas 7 en su natal San Cristóbal, su provincia preferida para la construcción a su gusto de sus estancias que era como se le nombraba a las moradas de grandes espacios con jardines. Eran famosas por la zona de Gascue que para ese entonces cuando Trujillo asume el poder quedaban fuera de la ciudad.

Saber que hay varias casas o estancias conocidas y otras perdidas, es de poco interés para algunos. Comenzando por los orígenes de Rafael Leonidas Trujillo es de saberse que su casa natal fue desaparecida por el mismo dictador, domicilio del cual no hay vestigios y se dice quedaba en la proximidad de la avenida Constitución, frente a la iglesia San Rafael y donde está el conocido parque de las piedras.

La más conocida en la ciudad es la estancia Ramfis, su primer hijo, o estancia San Gerónimo la cual pertenecía al ingeniero puertorriqueño Michelena, siendo apropiada por el poder y vivida por Trujillo desde el 1938 al 1952 y luego convertida durante su dictadura hasta hoy en el edificio de la Cancillería, pero hoy totalmente remozada donde ya no se distingue la estructura general de una casa de esa época. Se dice que él deja esta vivienda porque la sentía insegura por estar frente al mar caribe y podía ser víctima de un atentado por el tipo de régimen que se implementaba en ese momento.
Estancia Redames

Cuando el «Jefe» se muda de la estancia Ramfis pasa a la estancia Redames, su segundo hijo, del matrimonio con María Martínez, y por ser la residencia oficial de Trujillo al momento de su muerte fueron velados los restos y dando el pésame a la viuda Martínez, una zona distinta cerca de embajadas.

En este lugar funciona hoy en día la Plaza de la Cultura Juan Pablo Duarte, justamente donde está la biblioteca nacional Pedro Enríquez Ureña, estos alrededores pertenecían a dicha casa.

Regresando a San Cristóbal, la Casa de Caoba era indiscutiblemente, la residencia campestre predilecta del «Jefe«. Está ubicada en el punto más alto de lo que fue la hacienda Fundación, a poca distancia del popular balneario La Toma, su preferido y de uso exclusivo.

Antes de llegar al perímetro a la casa de Caoba, esta es la casa La redonda la cual pasó a pertenecer a la de caoba en sus diversas etapas de construcción, llegó a ser almacén según Augusto Bravo.

Construida en 1940 por ordenanzas de Trujillo en una superficie de 3.162 metros de construcción. Esta casa, de tres niveles, tuvo una primera etapa a cargo de la empresa Rodríguez Belgrado y el ingeniero William Roger, constructor también del primer mercado modelo de San Cristóbal. La Finca modelo, considerada como excelente o más bien la mejor del continente por contener los mejores caballo, el mejor ganado y mejores sembradíos.

La caoba fue el elemento principal utilizado en su diseño, de ahí su nombre. No obstante se emplearon otras maderas preciosas, pero en menor proporción, tal es el caso del roble que por su perfume maderable fue usado en el interior de los closet, la madera de capá y madera corazón de paloma, maderas preciosas que dan un fino acabado en cualquiera de sus usos y la flamante Casa de Caoba dio uso en las paredes, pisos y techo con revestimientos completamente en madera.

Según el historiador Bravo, esta casa en sus mejores años, fue finamente amueblada, y contaba con vajillas de plata y porcelana grabadas con las iniciales del tirano: RLTM.

Además de las tenencias comunes de una estancia que era como se denominaba en esa época a las propiedades de Trujillo, La Casa de Caoba tenía un despacho u oficina personal, barbería, gimnasio más un cuarto frío donde se congelaba la carne. En este lugar estaban las pertenencias que más le gustaban al tirano: su ropa, zapatos, joyas, sombreros y hasta el juego de plumas desaparecido con el cual firmo el cheque de la exoneración total de la deuda externa, el 19 de julio de 1947, con un valor US.9.271.855.55 .

Se conoce sobre los excesos cometidos por Trujillo con sus amantes y grandes fiestas hechas en su honor. La inclinación de esta casa se mantuvo hasta el final, tanto que el 30 de mayo de 1961 se dirigía hacia allá cuando fue asesinado en la autopista.

La «Veranera» de Najayo

Construcción vistosa en forma de barco y con una represa para los baños privados del déspota, la casa de playa que Rafael Leónidas Trujillo se hizo construir para visitar en sus momentos libres y se ha convertido con el paso de los años en un Destacamento del Ejército Nacional en el que permanecen de servicio jóvenes militares y la otra parte está en notable deterioro.
Por su ubicación la casa de la playa, ofrece una extraordinaria vista de la hermosura de las costas del país.

El castillo cerró:

La más ostentosa construcción del tirano levantada entre 1946 y 1949 con un precio exagerado para la época de cinco millones de pesos dominicanos, estuvo dirigida por su esposa María Martínez quien por su influencia con el arquitecto y constructores fueron violados los planos originales. Mucha de las informaciones sobre esta construcción y sus exageraciones están descritas en libro ‘’Monarca sin corona’’ del historiador Euclides Gutiérrez Félix.
Cabe destacar que esa edificación fue mandada a construir por el Partido Dominicano, y su encargado Cucho Pina Álvarez buscando la forma de agradar al jefe.

Un fortín de los más modernos de américa latina contando con siete pisos, 18 baños con accesorios originales, dos escaleras de granitos aun intactas y dos ascensores preservados con parte de su estructura original, pisos de mármol rosado y verde traídos desde Italia.

Cuenta con amplios salones que son réplicas del Palacio Nacional usados para diferentes actividades incluyendo uno para juegos de azar que hoy sirve de biblioteca llamada «Hermanas Mirabal«.

Estos mismo salones has sido usados para la filmación de películas relacionadas a la época como son el ‘’En el tiempo de las mariposas’’, un supuesto video clip musical de una artista internacional, también la película de ‘’Tubérculopresidente’’.

La de nigua, hacienda maría o casa blanca;
Con particularidad según el libro «Memoria de un cortesano« del doctor Joaquín Balaguer, de ser visitada una vez a la semana por el «Jefe», finca con la mejor caballería del territorio, con el primer campo de golf y la primera represa del mar que parecen rompe olas pero son baños romanos.

Utilizada para la masacre de la hacienda María, iniciando con la muerte de Pedro Libio Cedeño, Roberto Pastoriza, Tunti Cáceres, Estrella Sahdala y terminando con Modesto Díaz, el 18 de noviembre de 1961 quienes en horas de la tarde fueron trasladados de la Penitenciaria de La Victoria hasta dicha hacienda.

Se dice que Ramfis y varios de sus amigos íntimos estaban tomando tragos y masacrando uno a uno los culpables de la muerte del dictador. Varios investigadores coinciden en que solo Ramfis fue quien disparó queriendo vengar solo él la muerte de su padre, sin desligar la complicidad de otros oficiales de las Fuerzas Aérea Dominicana, llevándose los cuerpos y desapareciéndolos.

De las estancias menosmencionadas

En el sur especialmente en el sisal de Azua, logró tener según el historiador Bravo fincas para hacer sogas y la producción de arroz de las cuales no queda ninguna información sobre su lugar específico.
Barahona por su belleza y sus costas también fue usada para tener propiedades cerca del mar donde funcionan hoteles o espacio para residencia.

Sobre la Casa Amarilla, la cual pertenecía a Diana Pratt, una de las amantes más queridas de Trujillo, existe poca información sobre sus visitas.

La Casa Boriquen en Hatillo San Cristóbal, la cual pertenecía a la familia Michelena y apropiada por el dictador según el historiador Tomas Espinal. En esta hoy funciona la Escuela Nacional de Seguridad Ciudadana, educación y disciplina.

En Boca Chica se dice tenia propiedad cerca de lo que es el Hotel Hamaca, lugar donde tenían 6 habitaciones presidenciales, dedicadas al uso exclusivo de dictador Rafael Leónidas Trujillo

La casa de Angelitay sus demás hijos

Ubicada en la parte Este, específicamente lo que hoy se conoce como el nueve, que se convirtió en un centro de tortura.
Estuvo la casa de Angelita hoy convertida en el club de oficiales de la fuerza Aérea de San Isidro.

Siguiendo con Angelita Trujillo también está la casa de la Máximo Gómez con Independencia, donde se dice pasó su última noche vivo. Hoy habitada por una connotada familia, desconociéndose su forma de adquirirla ya que según las leyes deberían todas las propiedades pertenecer al Estado.

Siguiendo en la ciudad y concesiones a sus hijos está la vivienda de Pipi Trujillo, en la zona de San Carlos, en la calle Abreu y hoy en condiciones de hacinamiento.

La de Julia Molina, madre de Trujillo, de igual forma en la avenida Máximo Gómez y de la que en mejores condiciones queda, específicamente donde queda hoy APEC.

Trasladándonos al norte o Cibao está la de Long Beach en Plata Plata, donde estuvo la Voz de la Libertad de Luis Pelegrín y de quien también se desconoce cómo fue adquirida esta residencia por dicho empresario. En el municipio La cumbre igualmente tuvo una propiedad donde supuestamente fue torturada una de las hermanas Mirabal.
Se desconoce hasta que nivel tuvo propiedades en Puerto Plata el tirano.

La Herradura y Del Café fueron dos mansiones en Santiago ubicadas en Colinas de las cuales existen pocas informaciones. Solo que su amante Amita Ledesma quedó con una de ellas por no ser tan mencionada junto al déspota y de la cuales se sabe poco por los mismos hacinamientos de personalidades poderosas de la época

Ubicadas en Colinas u Oteros como puntos estratégicos, años pasan y van pisando la historia de casas de estancia del dictador Rafael Leónidas Trujillo, quien llenó de sangre y terror la República Dominicana por 30 años y de las cuales hasta ahora no existe un inventario.

Las viviendas del que se hizo llamar el ‘’benefactor de la patria’’ tenían la particularidad de estar ubicados en puntos estratégicos como colinas o frente al mar, más sus vistosos jardinespara exhibir su poder haciendo contraste con la sociedad en ese momento.

Las estancias tenían tres características principales: el lujo la lujuria, y el crimen, edificaciones convertidas en ruinas por la inclemencia de los años. Todas estas están ubicadas en sitios estratégicos y diseñadas por los mejores arquitectos de la época, los cuales visitaban el país para hacer destacar e internacionalizar sus trabajos en los cuales se utilizaban perfectos materiales, que tal vez por esta razón las inclemencias del tiempo no las han desaparecido a totalidad ya que todavía existen.

Todas las casas que se tiene conocimiento según el historiador Augusto Bravo, son lujosas, pomposas con demostración de poder y dominio haciendo galas de sus recursos, por esto se caracterizaron estas viviendas con exageraciones en decoraciones y amueblamiento.

‘’Se habla de convertir la ‘’Casa de la Caoba’’ en museo turístico que es más para el faranduleo y lo que debe construirse es un Centro de Investigación y Orientación para que presentes y futuras generaciones tengan una referencia de lo que significó ese periodo histórico con un progreso sangriento ’’ (Augusto Bravo).