Las causales analizadas desde la fe divina y el agnostismo

Las causales analizadas desde la fe divina y el agnostismo

LUIS SCHEKER ORTIZ

No es posible que mujeres y niñas de RD sean las más excluidas del planeta

-II-

Mal podría el movimiento de las tres causales al que pertenezco, dejar de entender que la causa raíz de este conflicto toca fondo, esto es, la brecha del dominicano(a) promedio para agotar un razonamiento a partir de los mandatos del método científico.

En la Cámara de Diputados, algunos representantes de la postura azul celeste hicieron razonamientos para motivar su voto que no superan una clase de lógica matemática de octavo grado.

El mantenimiento de ese ilícito en nuestro Código Penal es una excepción mundial que dice mucho del bajo nivel de desarrollo de la República Dominicana. No es posible que las mujeres y niñas dominicanas sean los seres humanos más excluidos del planeta y que el fundamento, para mantener esa discriminación, sea un dogma religioso

Jorge Luis Borges decía que el agnóstico es la persona con la postura más modesta, ni niega como el ateo, ni afirma como el creyente.

Agrego que, si acaso los atributos humanos de la razón los concedió un ser superior, el agnóstico y el ateo también lo honran cada día, sin ánimo de retribución, ejercitándolos a favor de lo que humanísticamente comprende como lo más favorable ante una situación limítrofe.

Con personas de fe o sin ella, intento construir vínculos en la dimensión filosófica. Los aspectos materiales que nos acercan perecerán. No estamos manteniendo la discusión de las causales en una cueva, ni estamos encendiendo por vez primera el fuego.

El humanismo se ha iluminado del mundo de la fe, como el de la razón. La búsqueda de verdades con sentido de justicia no es monopolio de ningún segmento social, y menos religioso.

Hace mucho tiempo que la identidad dominicana perdió la brújula y olvidó (si fue que alguna vez conoció) el significado de las libertades fundamentales que nos hicieron una nación libre.

La formación humanística impide agotar la búsqueda a partir de una convicción individual, aunque la salvación, como explica el creyente, es personal; por cierto, una noción bastante racional.

Nótese que el cristianismo se alimenta de ideas ateneas. Un mínimo de empatía a favor de toda mujer en el drama de alguna de las tres hipótesis del debate, se hace necesario para todo el que transciende en su sentido de la justicia conmutativa a la justicia distributiva, aristotélica y cristiana a la vez.

O bien, para todo el que conoce el movimiento progresista protagonizado por Eugenio María de Hostos en nuestro país hace más de cien años. Sin embargo, no me encierro dentro de la valija del método científico para alcanzar información y conocimiento. Sé que cada quien porta un equipaje intelectual, incluso para construir su sistema de creencias.

Al entendimiento que implica la vida en sociedad se llega primero, con apoyo solidario a las afectadas por la aprobación de un Código Penal que las deja en un grave estado de indefensión. Y segundo, a través del diálogo, con la posición contraria que sea capaz de ello.

¿De qué podemos conversar? De la fidelidad de su postura con las revelaciones, por ejemplo, aquella que sostiene que la vida inicia con la concepción. En mi opinión, un simple dogma.

Más leídas