Para esta época del año es normal que se realicen algunos cambios en la decoración de su hogar u oficina. Cambios que marcarán la diferencia en los distintos espacios en los que habita, haciéndolos más acogedores, elegantes, y hasta un tanto más festivos.

Colocar cortinas es una opción acertada. A pesar de ser un elemento que por lo regular es aprovechado por países de clima frío, en un país caribeño como  República Dominicana se pueden usar, siempre y cuando tenga claro lo que quiere y lo que necesita.

A la hora de colgar cortinas existen infinidad de posibilidades; elija cuidadosamente aquellas que favorezcan sus expectativas en cuanto a tela y  espacio. 

Si cuenta con amplios y altos ventanales, puede lucir largas cortinas que pendan de barras con terminados diferentes, ya sea en óxido, negro, a juego con los colores de las paredes o del propio tejido rematándolas con presillas y colocando bajo ellas una pieza de plástico que se cose a la tela para poder abrirlas fácilmente.

Es posible que solo use las cortinas por un período de tiempo, pero si desea dejarlas por más tiempo, es necesario forrarlas. Esto evitará que pierda la intensidad del color debido a la continua exposición al sol.

Otra forma de “vestir” sus ventanas es  poner doble barra de donde cuelguen las cortinas y unos visillos. Puede terminarlas con una galería entelada y buscar que terminen  con diferentes formas, como en suaves ondas.

Tipos de cortinas

Básicamente se conocen seis tipos de cortinas, aunque con muchísimas variaciones posibles:

• Fruncida: la banda superior se frunce; este plisado será mayor o menor según la cantidad de tela que se haya previsto para cubrir la ventana.

• Tablas: para ésta hace falta más tela que para la fruncida. Se suele calcular el triple del ancho del hueco de la ventana. Tiene la posibilidad de hacer los tachones de distinta anchura.

• Pliegue: También requiere más tela. Puede ser de doble o triple pliegue. Estéticamente le da mayor cuerpo a la cortina, ya que hace que la tela se dispare y coja volumen.

• Patas: Son sencillamente tiras, que pueden ir con botones, velcro, o sencillamente cosidas. También puede variar el ancho de la tira y la separación.

• Lazo: Es igual que el modelo a patas, pero las tiras no se juntan. Se dejan sueltas y se unen haciendo una lazada o un nudo, según se quiera. Tiene el inconveniente de que no corre bien por la barra.

• Ollado: Las anillas van incorporadas a la cortina y se introducen directamente en la barra.

Barra

Puede ser de cualquier material, pero los más utilizados son la madera y el hierro forjado. La cortina puede llevar las anillas cosidas, que  es la técnica más antigua, o sujetarlas con ganchos, una opción  más moderna.