El comité de investidura del Presidente electo recibió más de 170 millones de dólares para celebrar la toma de posesión de Donald Trump: todo un récord. Estadounidenses adinerados y grandes empresas se apresuraron a firmar abultados cheques, no sólo para poder participar en los festejos, sino también con la esperanza de obtener algún que otro favor del presidente electo.

Un millón de dólares. Esa es la cantidad que los gigantes del automóvil (Ford, General Motors, Stellantis, Toyota) y de la tecnología (Google, Microsoft) pagaron al comité de investidura de Donald Trump para participar en su toma de posesión. Es el doble de lo que pagaron a Joe Biden por su toma de posesión. Por este precio, tendrán el privilegio de reunirse brevemente con el presidente estadounidense y su vicepresidente, J.D. Vance.

Las multinacionales temen sobre todo los aranceles que Donald Trump quiere imponer a México y China, países donde muchas empresas estadounidenses tienen fábricas y operaciones. ¿Lograrán los grandes empresarios convencer a un presidente del que se dice que tiene una visión “transaccional” de la política? Uno de los donantes más generosos, Tim Cook, jefe de Apple, logró durante el primer mandato de Trump obtener exenciones fiscales para los productos de Apple.

Ya muy influyentes, los jefes de Amazon, Meta, Open AI y Uber han aportado personalmente sumas de siete cifras. Suficiente para abrir las puertas a cenas a la luz de las velas y suntuosos bailes. Otros, que prefirieron permanecer en el anonimato, pagaron sumas igualmente asombrosas, aunque no podrán participar en los festejos, ya que las entradas están agotadas desde hace varias semanas.

250 millones recaudados desde el día de las elecciones

Los aliados de Donald Trump han recaudado más de 250 millones de dólares desde el día de las elecciones para sus proyectos políticos, incluido el comité de investidura y algunos grupos externos aliados (frente a los 107 millones de 2017). Las donaciones a los comités de investidura no están restringidas, solo los extranjeros no pueden donar.

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El comité de investidura de Donald Trump es responsable de cubrir los costes de todos los eventos, a excepción de la ceremonia de juramento en el Capitolio, que pagan los contribuyentes. La ciudad de Washington DC habrá gastado 1,5 millones de dólares sólo en la estructura que debía acoger la ceremonia de juramento y a los invitados VIP frente a la escalinata del Capitolio. Al final, la estructura no se utilizará, ya que todo tendrá lugar en el interior, con un público limitado a 600 personas.

Cada año se distribuyen 220.000 entradas entre los miembros del Congreso, que se encargan de ofrecerlas gratuitamente a sus electores interesados en acudir a los alrededores del Capitolio o a lo largo del recorrido del desfile inaugural. Debido al frío, la ceremonia de investidura se ha trasladado al interior del Capitolio, y ante la previsión de -12 grados en el exterior, el Capital One Arena se ha puesto a disposición del público poseedor de entradas que desee asistir a la ceremonia con calefacción. Donald Trump acudirá allí a saludar a sus seguidores tras jurar el cargo.

Se supone que el dinero que no gaste el Comité de Inauguración se transferirá a otro comité, para la eventual “biblioteca presidencial” de Donald Trump. Un proyecto aún muy vago.