Las Ruinas de San Francisco es uno de los monumentos históricos más visitados por los extranjeros y criollos, por ser el primer monasterio del Nuevo Mundo.

Estas ruinas son las huellas de lo que fuera el Monasterio de San Francisco; su construcción se inició en 1508 a la llegada de los padres franciscanos, y finalizó para el 1560.

Su edificio fue una de las obras de Nicolás de Ovando, a quien se le atribuye la construcción de las más bellas e imponentes casas de la época colonial en Santo Domingo.

Pero para el 1586 el Monasterio de San Francisco fue saqueado por el corsario Francis Drake, dejando graves daños en su diseño. En 1664 fue reparado en su totalidad.

Sin embargo, en el 1673 el monasterio volvió a quedar destruido tras un terremoto, quedando en ruinas, tal y como se le conoce en la actualidad.

Más acontecimientos. Otras situaciones destruyeron aun más la edificación de ese monasterio. Una, la Batalla de Palo Hincado donde los franceses ocuparon el lugar y con el uso de un cañón destruyeron parte del techo.

Otra, la envestida del ciclón San Zenón en 1930, el cual también ocasionó graves daños a la vetusta edificación.

La otra cara. Luego de que recorras la parte cultural e histórica, es bueno que la conozca un domingo después de las 5:00 de la tarde, donde se viste de alegría y diversión para sus residentes y turistas que llegan a curiosear lo que sucede en este lugar.

Hasta las 10:00 de la noche en Las Ruinas de San Francisco se percibe el son, merengue, salsa, guaracha, y boleros con la presentación del Grupo Bonyé y una series de artistas que ellos invitan a compartir no solo sus canciones, sino a interactuar con el público.

Esto es para muchos una parada obligada, ya que al caer la noche de cada domingo puedes ver buenos y malos bailadores, además de un gran número de personalidades del medio deportivo, artístico y, porque no, políticos.

Ubicación. Las Ruinas del Monasterio de San Francisco está ubicada en la calle Hostos con calle San Francisco.

En una de las entradas del Monasterio, en la parte superior, está el Cordón de la Orden Franciscana, una cruz y el busto del Padre Billini.

Algunos guías turísticos han llegado a informar, sin precisión, que es posible que Bartolomé Colón esté enterrado en la capilla de los Terciarios o de la Tercera Orden, donde estaba San Francisco el viejo.