El Club Deportivo Naco tiene programada para el próximo día 28 la celebración de su asamblea anual. Así se cumple con el mandato de los estatutos de conocer su gestión financiera del 2015, y a la vez celebrar lo que también se estipula de cada dos años, renovar su directiva.
La actual directiva de nueve miembros, presidida por el señor Toñito Alma, termina su mandato con la satisfacción del deber cumplido. Lo prometido en abril del 2014 en su programa de trabajo, como promoción de campaña de la ocasión, se cumplió en más de un 85%. Solo quedan pendientes algunas remodelaciones, que de seguro, los sucesores de la directiva de Toñito le darán inicio en breve tiempo.
En los pasados dos años la membresía creció hasta cerca de los 13 mil miembros. Se convirtió en un centro de unidad familiar, atractivo y anhelado por las familias dominicanas que buscan un lugar de esparcimiento seguro y moderno. Son muchas las familias dominicanas, que por su capacidad de ingresos de clase media pueden aspirar a ser socios del club.
La actual campaña, en su semana final de proselitismo, ha enardecido las pasiones entre los socios. Y una apreciable mayoría de ellos apoyan a la candidatura de la Institucionalidad y Progreso para la continuación de lo bueno que se ha hecho con Alma, que ha dejado como su sucesor al doctor Andrés Bustamante. Él es un socio de larga data y profesional de la medicina, muy recto y disciplinado. Siempre procura que todo se cumpla y marche según los estatutos y reglamentos.
El doctor Bustamante es muy conocido en su ambiente profesional por su capacidad y es un entusiasta deportista del baloncesto. Gracias a él es una realidad la Plaza de los Inmortales del deporte naqueño, donde cada año se premia a los mejores deportistas y propulsores que han incidido positivamente en la vida y realce de los atletas del club en todos los ámbitos nacionales e internacionales. Es un miembro muy querido de la familia bancentraliana con una larga trayectoria de trabajo en el Banco Central.
Los demás integrantes de la plancha de Institucionalidad y Progreso son reconocidos por su larga data de servicios. Cabe destacar que se cuenta con la presencia de un socio fundador del club en 1957, que por su entusiasmo, de seguro que realizará una gran labor. Se trata de Moisés Franco Llenas muy conocido en los corrillos del club por su presencia cotidiana y su gran vocación de servicio, que también la brinda al Club de Leones que opera en esa entidad. La candidatura del doctor Bustamante fue fruto de un consenso de la actual Junta Directiva, de la cual surgieron la mayoría de los integrantes, con excepción de los miembros que no quisieron continuar que se reemplazaron por otros valiosos socios.
Una de las planchas contendoras del doctor Bustamante está presidida por un inquieto socio, amante del tenis, que todavía es parte de la directiva actual. Pero él decidió trillar su propio camino y no quiso adherirse a la decisión de aceptar el compromiso de los miembros de la Junta Directiva. Se había acordado ser una monolítica y sólida maquinaria para respaldar al doctor Bustamante.
Con la rivalidad de dos miembros de la Junta Directiva actual, más la inserción de otras dos planchas que compiten con entusiasmo, se ha logrado animar el ambiente naqueño. Los diferentes ambientes del club se animan con la emoción que le imparten los socios seguidores de cada uno de los aspirantes presidenciales, junto con los demás integrantes de cada una de las cuatro planchas.
Los socios tienen la seguridad de que los aspirantes presidenciales principales y los demás son muy conocedores de las entrañas del club y de lo que se está haciendo para organizar e institucionalizar el club. Ese es el sendero para mantenerlo en la ruta de la modernidad. Es la única manera para hacerle frente a los retos que enfrenta un club del tamaño de Naco. Lo logrado hasta ahora impedirá que ningún socio quiera destruirlo para satisfacer sus ambiciones y que tanto le ha costado a la actual directiva para consolidarlo. Se han padecido muchas angustias y demandas de socios desaprensivos. Estos siempre buscan pescar en el mar revuelto de la desorganización que ocurría en épocas pasadas.