La falda, como prenda clásica del ropero femenino, está sometida a cambios según lo que impongan las tendencias o las  mujeres que por su trascendencia se convierte en icono de la moda.

Así, Jackeline Kennedy impuso el estilo  corte A o trapecio, y no solamente en falda, sino también en vestidos. Ahora Michelle Obama, primera dama de  Estados Unidos y  la de Francia, Carla Bruni de Sarkozy han incorporado a  sus armarios la moda de las faldas talle alto,  rectas con pinzas en las pretinas, súper de moda en los años 40 y 50 del siglo pasado.

El largo, dos o tres pulgadas por debajo de la rodilla,  le imprime a esta pieza su categoría de insustituible en la moda clásica contemporánea.

La señora Obama combina  estas prendas con blusas muy elegantes y taco medio alto, e incluso planos  cuando le toca escaparse un poco del protocolo impuesto por sus funciones de Estado.

Hablamos de unos estilos de faldas que además de transmitir frescura y comodidad, permiten exhibir una silueta elegante.

La moda adoptada por las señoras Obama y Sarkozytambién es predilecta de otras mujeres importantes, como las famosas actrices Eva Longoria, Eva Mendes, Victoria Beckham, Penélope Cruz, Sarah Jessica Parker, que usan estos modelos en sus apariciones públicas.

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Evolución

En las primeras décadas del pasado siglo las faldas se llevaron con abundante tela, luego cuando llegó  la Segunda Guerra Mundial, diseñadores  de esas épocas redujeron su volumen por la escasez de telas apareciendo la falda estrecha o tipo lápiz. Coco Chanel, diseñadora visionaria  creó, en los 40, el traje sastre de falda y chaqueta confeccionado en tweed. 

Ellas las llevan

Tendencia

Personalidades como la primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama y las atrices Eva Mendes, Eva Longoria, Penélope Cruz, Victoria Beckhan y Sarah Jessica Parker han sido las responsables del regreso de las faldas   talle alto y plizada.

Esta tendencia se ha impuesto con tanta fuerza que no hay  fashionista que prescinda de esta pieza en su closet. ¡Vivir! muestra ejemplos del furor que están causando las faldas.