Debo insistir ante el presidente Danilo Medina, porque puede que el ministro de las FFAA., almirante Sigfrido Pared Pérez no se atreva, la imperiosa necesidad de convertir las fortalezas del Ejército Nacional en objetos útiles a las mejores causas del país.

Las excepciones debieran ser las fortalezas de la frontera, porque cuál es el interés militar de una fortaleza en cada ciudad o pueblo, cuando eso es una reminiscencia de la Era de Trujillo que las usaba como  método de infundir el terror a la ciudadanía, total que de nada le sirvió porque no atemorizó a quienes lo ultimaron.

Diario Libre del día 22 de marzo último inserta una nota desde Moca en que anuncia el propósito de demoler la fortaleza  Dos de Mayo, mientras los mocanos propician construir un politécnico que podría administrar INFOTEP,  que reiteradas  pruebas de alta eficiencia ha demostrado.

Es una variante que siempre he propiciado, pero además, albergues para adolescentes descarriados, que los hay y muchísimos delincuentazos, maternidades, centros culturales administrados por el  Ministerio de Cultura, escuelas que tanta falta hacen.

Y el presidente Medina asignar funciones útiles a los guardias, en vez de aventar panzas por la ociosidad, prestando más de cinco  mil labores en los departamentos del Estado, a funcionarios y jefotes militares, enviándolos a reforestar, al INDRHI a limpiar canales de riego, a crear colonias agrícolas en la frontera.

Los guardias nos cuestan muchísimo a los contribuyentes y nos reditúan muy magro, si nos detenemos a mirar el presupuesto de las FFAA que este año es de RD$l5,497.68l.804 millones, una “rumba” de cuartos para una contrapartida cuestionable..