Houston .– Los máximos responsables del béisbol profesional de las mayores y el sindicato de peloteros siguen en el proceso de conseguir que la próxima temporada puedan disputarse partidos de la temporada regular en Puerto Rico.
De nuevo se llegó a un acuerdo en ese sentido, además de asegurar en el próximo convenio colectivo la inversión de cinco millones de dólares en la promoción y desarrollo del deporte del béisbol en Puerto Rico.
El trabajo entre las Grandes Ligas y el sindicato será clave de cara a recoger esa partida económica cuando se discuta el contenido del que a partir del próximo año será el convenio colectivo que entre en vigor, el actual finaliza el 1 de diciembre.
Sin embargo, ninguna de las dos partes en el comunicado oficial que ofrecieron sobre el asunto dieron a conocer detalles específicos sobre los partidos que se podrían disputar en un futuro en la isla.
Esta temporada también estaban programados dos partidos de la temporada regular entre los Marlins de Miami y los Piratas de Pittsburgh, pero se tuvieron que cancelar debido a la negativa de los jugadores de viajar a Puerto Rico ante las preocupaciones que le surgieron con la existencia del virus del Zika.
Las Grandes Ligas y el sindicato de jugadores reconocieron que la tradición beisbolística que se da en Puerto Rico ha hecho posible la presencia de brillantes profesionales dentro de la competición y generado una gran afición.
El comisionado de las Grandes Ligas, Rob Manfred, que mantuvo abiertas todas las opciones hasta el final para que este año se pudiesen jugar los partidos en Puerto Rico, reconoció que había llegado el momento de dar todo el apoyo al desarrollo del deporte de la pelota en la isla.
“Nuestro objetivo es que con el apoyo que demos a nuestro deporte permita que los niños puertorriqueños jueguen al béisbol”, destacó Manfred en el comunicado oficial.
Por su parte, el jefe del sindicato de peloteros, Tony Clark, admitió estaban completamente abiertos a realizar el máximo de los esfuerzos a la hora de ayudar a expandir la popularidad del deporte en Puerto Rico. “Somos conscientes que nuestra participación beneficiará de manera muy especial a toda la comunidad del béisbol”, subrayó Clark, que al igual que Manfred siempre estuvo dispuesto a que los partidos entre los Marlins y los Piratas se jugasen en Puerto Rico, pero fueron los jugadores los que en su mayoría reiteraron que no iban a ir.
Al margen del problema surgido con la cancelación de los partidos de la temporada regular, Puerto Rico, que siempre ha tenido una gran tradición en el deporte del béisbol, en la última década no se ha visto reflejada con la presencia de figuras dentro de las Grandes Ligas ante la falta de producción de nuevo talento.
Desde el 2005, sólo cinco jugadores seleccionados de Puerto Rico han participado en más de 100 partidos de Ligas Mayores.
Actualmente Puerto Rico tiene como jugadores estelares en las Grandes Ligas a los jóvenes talentos de los torpederos Carlos Correa, de 21 años, que juega con los Astros de Houston, y Francisco Lindor, de 22 años, que milita con los Indios de Cleveland, los actuales líderes de la División Central de la Liga Americana.