MARIANNE DE TOLENTINO
La crítica de arte Marianne de Tolentino, en  “Creación” de esta semana hace su valoración de las reproducciones de las obras del Museo de Louvre  que se exponen, desde el martes 18, en el parque Independencia.

Son 122  reproducciones de 115 artistas de los más valorados en la historia del arte mundial.

  Este evento sobresaliente no solamente ofrece la oportunidad de ver cuadros magníficos – y en su tamaño natural-, con sus marcos originales  de un valor estético e histórico, sino un folleto-catálogo  distribuido gratuitamente.  Talleres y actividades de animación que se iniciaron con la conferencia de Marie-Catherine Sahut,  comisaria de la exposición y conservadora en jefe del Departamento de las Pinturas del Louvre. «Imágenes del Louvre» luego  viajará a Santiago, instalándose  en la verja del Gran Teatro del Cibao.

Imágenes del Louvre, un acontecimiento cultural

Un gran deleite para los ojos

El parque Independencia se ha convertido en el primer espacio de arte de la República Dominicana, con las más impactantes  muestras, que todos pueden mirar tantas veces como quieren. Allí siempre surgen sorpresas maravillosas: la actual exposición «Imágenes del Louvre, seis siglos de pintura europea» es el mejor testimonio de ese éxito, sin comparación en la historia de la cultura dominicana.

Este evento sobresaliente no solamente ofrece la oportunidad de ver cuadros magníficos – y en su tamaño natural-, con sus marcos originales  de un valor estético e histórico, sino un folleto-catálogo  distribuido gratuitamente,  talleres y actividades de animación que se iniciaron con la conferencia de Marie-Catherine Sahut,  comisaria de la exposición y conservadora en jefe del Departamento de las Pinturas del Louvre. Pronto un hermoso catálogo nutrirá una memoria imborrable.

Creemos que se trata de un ejemplo de lo que se puede y debe hacer, con mucho trabajo, una alta competencia  y una cooperación entusiasta. Se han unido al Museo del Louvre, la Embajada de Francia, la Secretaría de Estado de Cultura y el Centro Cultural Cariforo, principal organizador local del evento. Una serie de patrocinadores (ver encuadre) hicieron aportes que han permitido la realización del proyecto.

No pocas personas piensan que esta exposición  ha tomado años para convertirse en un hecho. La realidad es distinta. Ya concebida a finales del año pasado, se inició de verdad en los primeros días de enero 2007, cuando el Museo del Louvre nos acordó la cita histórica de la presentación del anteproyecto, que introducía a la planificación y los principios que hoy rigen la exposición.

Marie-Catherine  Sahut fue el eje y el alma de esa actividad, gracias a su convicción, a la confianza y al apoyo que brindó desde el inicio. Ella conocía Santo Domingo, habiendo venido a nuestro país en el 2004, cuando tuvo lugar en el Centro León y en el Museo de Arte Moderno la exposición de dibujos  y grabados de Theodore Chassériau, prestados por el Museo del Louvre y el Biblioteca Nacional  de Francia.  El éxito y el excelente manejo institucional  fueron los antecedentes  que permitieron que el Louvre accediese  a esta solicitud, inaudita e inédita.

En efecto, el Museo del Louvre no suele exhibir reproducciones, sino originales, los  que presta con cautela y garantías, siendo patrimonio francés… y universal. Pero ese establecimiento  público tiene una vocación especial: la de enseñar y difundir la creación artística plurisecular. En base a esa filosofía esencial -de múltiples aspectos, con una exigencia de excelencia-,  y al precedente  muy positivo de Chassériau, se acogió la propuesta nuestra..

El Departamento de Pinturas y Marie-Catherine Sahut se dirigieron a las principales instancias  del Louvre, presentando esta iniciativa distinta y obteniendo la aceptación del presidente-director general Henri Loyrette, experto y enamorado de los grandes proyectos,  y siendo un factor esencial, el apoyo de Aline Sylla,  máxima ejecutiva del desarrollo cultural, y hoy consejera de la oficina del Primer Ministro de Francia

Luego, con una labor intensa, desplegada del Museo del Louvre a las instituciones dominicanas, se estuvo concretando «Imágenes del Louvre», metódica y progresivamente, hasta culminar en la formidable exhibición del Parque Independencia -la que también incluye la historia del Louvre y vistas de sus construcciones  palaciegas-.

Ahora bien, ese acontecimiento no se  hubiera logrado sin el avance tecnológico de la época, desde la comunicación permanente e instantánea. hasta la confección de las esplendorosas  imágenes, cuyo punto de partida fueron las fotografías digitales, expresamente  tomadas para Santo Domingo, en su gran mayoría por el departamento especializado del Louvre.

No nos podemos sentir más que conmovidos por la colaboración y la entrega del primer museo del mundo, que nos sirve de ejemplo y de aliento. Señalaremos que los textos, fundamentales para aprovechar el contenido de los cuadros a la segunda mirada, fueron escritos  por un especialista joven, joven también fue la asistente del Departamento de Pinturas, que cumplió una labor increíble de búsqueda y recopilación en los comienzos de la programación. La hazaña tecnológica incluye  a las  bellísimas imágenes,  de una precisión absoluta, incluyendo  a los colores, que dan la ilusión de ser originales. Cuando, en la ceremonia de inauguración, se desvelizó la Gioconda de Leonardo da Vinci, un estremecimento se produjo en todos los observadores. A este respecto, hemos de mencionar la entrega y capacidad profesional de Miguel Peralta, autor de las impresiones, un trabajo que ha dejado al Louvre muy complacido. En cuanto al arquitecto Fernando Ottenwalder, especialista de las realizaciones  museográficas públicas  y colaborador nuestro desde «La Tierra vista desde el Cielo» -el gran antecedente de las exposiciones  del parque Independencia-, todos le agradecen su dedicación excepcional. Sería imposible citar por sus nombres a quienes, de distintas edades, oficios y responsabilidades, concurrieron  a la preparación de esta exposición. Nuevamente la emoción nos embarga cuando pensamos  en cada uno de los importantes copartícipes del éxito. No tenemos que volver a mencionar la Embajada de Francia y su eficiente Departamento Cultural, a la Secretaría de Estado de Cultura y sus cooperadoras  divisiones de Patrimonio. Hubiera sido imposible pues alcanzar estos resultados sin un trabajo plural en equipo, donde ahora se destacan  los miembros de la Seguridad en el Parque. Cabe señalar igualmente  que la respuesta y respaldo de la prensa dominicana  contribuye a la magnitud del evento.Después de Santo Domingo,»Imágenes del Louvre» viajará a Santiago, instalándose  en la verja del Gran Teatro Cibao, y sabemos que la receptividad seguirá siendo excepcional. Luego, un itinerario internacional – ¡las solicitudades  ya llueven!- espera a la exposición en el Caribe, en América Latina, y mucho más allá del continente americano. No obstante, las perspectivas de difusión no se basan en sueños  ni en aspiraciones.

El Louvre lógicamente será quién decidirá del porvenir de esta primicia, de un verdadero experimento, en nuestra opinión completamente abierto, si todo continúa como ha empezado   mientras tanto, aquí, hasta el 15 de noviembre, disfrutamos enormemente  estas imágenes.

Contenido

138 paneles
122 obras reproducidas
115 artistas
121 carteles de textos

Temas: retratos, pasiajes, bodegones,
Escenas de la Religión,
de la Condición humana, de la Mitología
Edad Media, Siglo XIV, Siglo XV, Siglo XVI
Siglo XVII, Siglo XVIII, Siglo XIX
Escuelas europeas  de Pintura: francesa, italiana
Del Norte, Española, Inglesa.

Informaciones sobre la Historia del Louvre
Mensajes