Las islas de los conflictos mundiales

Las islas de los conflictos mundiales

Repartidas por todo el planeta existen algunas islas que albergan en su territorio dos países distintos en creencias, desarrollo, orígenes y educación. Esto ha dado lugar a serios conflictos de convivencia. En casi todas esas islas se ha ido superando con el paso de los años y el entendimiento mutuo hasta llegar a una civilizada convivencia pero de latente crispación.
En el pasado siglo XX los conflictos que tuvieron lugar en esas islas binacionales fueron cruentos y amenazantes para la paz regional, ya fuera en Europa o en Asia. En Irlanda los protestantes y católicos escenificaron cruentos enfrentamientos de antología. La hemorragia de la sangre inglesa fue notable para controlar las pasiones por las creencias y dieron lugar a grupos extremistas radicales que esparcieron su fama de violencia letal por toda Europa y hasta en Estados Unidos donde muchas ciudades se formaron al calor de esa migración irlandesa como en Boston.
Los más sonados enfrentamientos de nacionalidades distintas en una isla fueron los de Chipre que también separados por el norte y el sur mantuvieron un estado de guerra civil durante las décadas del 60 y siguientes del siglo pasado. Se mantuvo incendiada esa pequeña isla de 9,251 kilómetros cuadrados. Las poblaciones de orígenes turco y griego se mantienen en un estado de amenazante confrontación sin entenderse pacíficamente siendo la población griega de mayor número que la de origen turco. Hasta ahora prevalece la paz.
La isla de Borneo, después de la II Guerra Mundial, tiene dividido su territorio entre Indonesia, Malasia y Brunei. La agresividad de las creencias de las poblaciones se manifestó con violencia después de la guerra. Fueron años de agonía, guerrillas y batallas sangrientas hasta que finalmente llegó el entendimiento. Se estableció en este siglo la convivencia en una isla que se desarrolla a pasos agigantados. Las famosas torres Petrona están ubicadas en Kuala Lumpur capital de Malasia. En una playa de Indonesia repleta de turistas ocurrió el terrible tsunami de hace catorce años que arrasó poblaciones y vidas el 26 de diciembre del 2004 en alucinante fenómeno de espanto con la violencia del mar desatada en enormes olas que aplastaron varias poblaciones indonesias. Ahora es una isla que convive pacíficamente empeñada en el desarrollo de sus habitantes, que en el caso de Brunei, es uno de los más altos del mundo comparable al que exhibe Singapur.
En la región caribeña tenemos dos casos de islas habitadas por poblaciones distintas. Una es la pequeña San Martin con una población holandesa en una mitad y francesa en la otra mitad. Por su nivel de desarrollo y educación no tienen roces y cohabitan pacíficamente. Ahora tenemos el caso de la isla de Santo Domingo que desde hace siglos es habitada por dos pueblos muy distintos en cuanto a sus orígenes, costumbres y creencias. Por culpa de España, la parte oriental de la isla era una colonia formada por inmigrantes pobres y una población esclava llegada de África, languidecía frente a la colonia francesa de la parte occidental. Esta se convirtió en próspera colonia de colonos franceses con millares de esclavos que en 1795 se sublevaron al influjo de la revolución francesa y degollaron o expulsaron a todos los colonos blancos y conformaron un estado que nacía rico y poderoso. Pero la parte española indefensa veía la poderosa marea negra que inició sus incursiones hacia oriente hasta que en 1822 se asentaron por 22 años desalojando a España de la que había sido su colonia preferida en el siglo XVI.
No fue hasta que Juan Pablo Duarte, y los jóvenes y aguerridos seguidores, le dieron forma a la nación dominicana que en 1844 se separó de sus opresores haitianos. La parte dominicana vivió las angustias de las invasiones haitianas y finalmente en 1856 fue la última expedición de occidente. Pero al poco tiempo el país era anexado a España por el temor y dudas de los que habían formado una nación inviable.
Ya la historia es muy conocida. Y aun cuando no existe un estado de confrontación agresiva y los dominicanos continuamos disfrutando de un desarrollo notable que desde hace años es el mayor del continente que ya atrae a más de seis millones de turistas al año y el establecimiento de importantes empresas de manufactura como son algunas de medicinas sofisticadas, no se ha podido borrar el íntimo temor que existe frente a los haitianos. Ahora ingresan al país en oleadas indetenibles a través de una inexistente frontera y con la bendición de las autoridades que así suplen una mano de obra que hace falta en los niveles más bajos de la producción como la agricultura y la construcción. Desde ahora se están sembrando las semillas de la próxima y letal confrontación.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas