Las islas privadas del Caribe propiedad del fallecido financista Jeffrey Epstein fueron puestas a la venta y podrían alcanzar un valor de US$125 millones.
Daniel Weiner, abogado del fondo patrimonial de Epstein, confirmó a la BBC que las dos islas, Little St James y Great St James, están en la lista de activos puestos en el mercado.
Weiner dijo que parte de las ganancias de la venta se utilizará para resolver las demandas pendientes.
Epstein murió en prisión en 2019 mientras esperaba ser enjuiciado por acusaciones de tráfico sexual y conspiración. Tenía 66 años.
Estaba acusado de pagar a niñas menores de 18 años para realizar actos sexuales en sus mansiones de Manhattan y Florida.
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El multimillonario, que se había declarado no culpable, se enfrentaba a hasta 45 años en la cárcel en caso de ser condenado.
Antes de los casos penales en su contra, era conocido por su riqueza y sus contactos de alto perfil.
El financiero compró Little St James de 90 acres, con más edificios e infraestructuras, hace casi 25 años por casi US$8 millones.
En 2016 adquirió Great St James, más grande, por US$22,5 millones. Quería construir viviendas, un anfiteatro, así como una oficina submarina y una piscina.
Epstein fue acusado por la fiscal general de las Islas Vírgenes de Estados Unidos, Denise George, de abusar sexualmente de niñas de tan solo 12 años en Little St James.
La demanda, presentada hace dos años, también afirma que una niña de 15 años intentó escapar de la isla nadando antes de ser capturada y de que le fuera confiscado su pasaporte.
Visitantes de alto perfil
Weiner, socio del bufete de abogados de Nueva York Hughes Hubbard & Reed, dijo que la venta se lleva a cabo con el apoyo de la fiscalía.
Las ganancias «serán utilizadas por el fondo de la herencia para la resolución de demandas pendientes y los impuestos habituales de la operación».
El diario The Wall Street Journal informó que las dos islas podrían venderse por hasta US$125 millones, aunque algunas estimaciones sitúan el valor en cerca de US$86 millones.
Según los informes, Epstein recibió a varios invitados de alto perfil en Little St James a lo largo de los años.
Una de las presuntas víctimas de Epstein, Virginia Giuffre, afirmó en una demanda civil que el príncipe Andrés, hijo de la reina Isabel II de Inglaterra, había abusado de ella en la isla.
El también duque de York egó las acusaciones y dijo que no recordaba haber conocido a Giuffre.
El príncipe llegó recientemente a un acuerdo con Giuffre para finalizar un caso civil en Estados Unidos. Bajo los términos acordados, el príncipe hará una «donación sustancial a la organización benéfica de la señora Giuffre».
El dicho acuerdo el duque no aceptó ninguna responsabilidad y siempre rechazó enérgicamente las denuncias de conducta inapropiada.
Otros visitantes de Little St James incluyeron a Jes Staley, el exjefe de Barclays.
Renunció al banco de Reino Unido el año pasado luego de una investigación de los reguladores financieros sobre la relación del banquero con Epstein.
Staley visitó la isla de Epstein en 2015, unos meses antes de asumir el cargo de director ejecutivo en Barclays.
Los reguladores financieros de Reino Unido iniciaron una investigación después de que JP Morgan, el exempleador de Staley, entregara 1.200 correos electrónicos enviados entre el banquero y Epstein, principalmente entre 2008 y 2012.
A los reguladores les preocupaba que los correos electrónicos mostraran una relación más cercana entre los dos hombres de lo que Staley había descrito al directorio de Barclays.
Staley está impugnando el hallazgo de los reguladores.