Tras las malas críticas recibidas en los festivales de Venecia y Toronto, Madonna intenta desesperadamente salvar su película W.E.. Según informan varios medios británicos, los productores han obligado a que la película regrese a la sala de montaje. Así, la cinta de Madonna podría ser recortada en unos diez minutos en relación con el montaje que se ha presentado en los festivales. Quizá necesite un poco de esto y un poco de aquello, todavía es un trabajo en proceso, reconoce la propia Madonna que, en todo caso, ya arremetió contra las críticas al considerar que se juzgaba su figura y no su trabajo como directora.