POR NELLY  RAMÍREZ
En la medida que el hombre fue adentrándose y adaptándose a la civilización y el urbanismo, así también empieza a demandar nuevas herramientas para su comodidad y bienestar; es el caso del mueble, que existe desde que éste decide dejar el suelo, las piedras y los troncos para sentarse.

Las mecedoras, diseño de muebles utilizados desde hace cientos de años, forman parte de la historia del mobiliario dominicano, la cual tuvo una gran influencia europea y estadounidense. El diseño victoriano fue el que mayor auge obtuvo en el mueble, especialmente a mediado del siglo XIX y principio del XX, cuando reinó en Inglaterra la Reina Victoria. Estos muebles eran diseñados en madera preciosa, tales como la caoba, el ébano y el palo de rosa. Este estilo de mueble, que incluye también a las mecedoras, tenía un diseño bastante acentuado en la decoración, en el que se utilizaba la talla como elemento predominante.

Generaciones pasadas y actuales tienen sobre las mecedoras gratos recuerdos, ya sea porque alguna vez fueran acurrucadas por sus abuelas o sus madres en una de éstas, o porque las utilizaran para extasiarse en un espacio de la casa o en el umbral de una puerta mientras observaba el crepúsculo de la tarde,  tomando un café,  merienda, leyendo un interesante libro, viendo televisión, conversando, bordando o tejiendo.

La mecedora es un mueble básicamente para el descanso, donde se puede relajar el cuerpo,  meditar, dormir al bebé, y hasta para los hermanos mecerse mientras juegan y se demuestra afecto y cariño.

Este mobiliario, que por demás, es de gran utilidad en la decoración, mucho más ahora cuando los objetos de usanza antigua toman  mayor relevancia, a sido empleado por famosas personalidades del mundo.

Uno de los fabricantes de este mueble, conocido internacionalmente, fue Pascual Palacios, español que se radicó en Santo Domingo en el año 1920 y estableció un taller de escultura y  marquetería. Datos recopilados en archivos periodísticos confirman que fue él quien introdujo al país una nueva estética en el estilo del mueble, producto de la mezcla entre el estilo renacentista castellano y su propia inspiración, lo que se consideró como la raíz del mueble dominicano, dando origen al estilo Palacios.

Pascual Palacios en 1937 fue considerado el ebanista oficial del Estado, debido a que el dictador Rafael Leonidas Trujillo, desde que inició su mandato en 1930, fue uno de sus principales clientes. Fue él que fabricó la famosa mecedora que usó el presidente norteamericano John F. Kennedy.      

En principios las mecedoras eran fabricadas en maderas preciosas, sin embargo, hoy día existen diversidad de diseños y se utilizan en diferentes espacios, desde terrazas, salas, balcones, galerías e íntimos rincones del hogar en los que se quiere lograr un ambiente cálido y acogedor. Se fabrican en maderas preciosas, hierro, fibras,  mimbre, rattán y otros más.

Las mecedoras de madera aportan antigüedad y belleza a los espacios, así como las combinadas de diferentes fibras vegetales, que producen un aspecto agradable y fresco al mobiliario interior.