Las medidas de restricción monetaria aplicadas por el Banco Central, vía un aumento de las tasas de interés y el encaje legal,  han frenado el crédito y la actividad económica. De más de 30 por ciento en que había crecido el crédito bancario en enero con relación a igual período del año anterior, el crecimiento bajó a 10 por ciento a mediados de septiembre.

La cartera de crédito de los bancos estuvo subiendo hasta junio, pero a partir de julio se ha producido un descenso que a mediados de septiembre había alcanzado un acumulado de 8,161 millones de pesos. El Banco Central aplicó las medidas monetarias restrictivas  en el entendido de que al ritmo de crecimiento que lleva el crédito, se iba a producir un sobrecalentamiento de la economía dominicana, con efectos sobre el tipo de cambio y los precios internos.

La restricción monetaria ha implicado un menor crecimiento de la economía. Las proyecciones oficiales indican que el crecimiento de la economía bajará  entre 3 y 4% en el segundo semestre del año, para alcanzar un promedio en todo el año de alrededor de 5%.

Al producir una reducción de la actividad económica, las medidas monetarias también han obligado a un ajuste fiscal, al bajar los ingresos y los gastos del gobierno.