Las mujeres, detrás y delante de la cámara, heroínas de Cannes

Las mujeres, detrás y delante de la cámara, heroínas de Cannes

Francia. – Las mujeres dominaron este domingo las proyecciones en Cannes, con «Mal de Pierres» firmado por Nicole Garcia y «American Honey» de Andrea Arnold, filmes con heroínas fuertes, en conflicto con lo que el destino les depara.

Con esas dos películas se completan las tres en competencia este año realizadas por mujeres tras el exitoso estreno de la víspera de «Toni Erdmaan» de la alemana Maren Ade, la cinta más aplaudida en lo que va de festival y mejor calificada del certamen por la prensa internacional.

Una mujer en pos de amor 
En «Mal de Pierres», tercer intento de la francesa Nicole Garcia por llevarse la Palma de Oro, la oscarizada Marion Cotillard encarna a Gabrielle, una joven que vive en los años 1950 en la propiedad rural de sus padres.

Gabrielle, a la que su familia considera mentalmente inestable, es obligada a casarse con José (Alex Brendemühl), un trabajador de temporada español refugiado en Francia que soporta estoicamente el rechazo de su mujer, quien termina aceptando el matrimonio que le imponen las circunstancias.

La protagonista padece cálculos renales y es enviada a hacerse un tratamiento en Suiza, donde conoce a un soldado herido en la guerra de Indochina (Louis Garrel), del que se enamora hasta la locura.

El filme logra apartarse del melodrama trillado gracias a un giro inesperado en la última media hora que aporta espesor psicológico al conjunto.

 En busca de un sueño 
Junto a Garcia, la directora Andrea Arnold estrenó el domingo en Cannes «American Honey», la primera película que filma fuera de su Reino Unido natal, protagonizada por Shia LaBeouf. Esta «road movie» sigue el periplo de un grupo de jóvenes que recorre Estados Unidos vendiendo suscripciones a revistas puerta a puerta, entre fiestas hasta el amanecer, historias de amor e infracciones a la ley.

Destaca en el grupo Star, una joven que verá en esta comunidad una oportunidad de escapar de un universo familiar disfuncional, interpretada por Sasha Lane, que da sus primeros pasos en el cine.

La película retrata a «una juventud que intenta salir adelante trabajando duro, vendiendo suscripciones a revistas, que en resumen busca hacer realidad su propio sueño americano», declaró Andrea Arnold en conferencia de prensa.

El filme fue acogido con poco entusiasmo en la proyección para la prensa, pero el elenco incendió con sus pasos de baile, al ritmo del hip-hop, la alfombra roja este domingo, contagiando con su ritmo a la actriz estadounidense Kristen Stewart y al delegado general del festival, Thierry Frémaux. Arnold pisó por primera vez la Croisette en 1998 con su cortometraje «Milk».

Tras llevarse un Oscar al mejor cortometraje por «Wasp» en 2003, sus dos primeros largos, «Red Road» (2006) y «Fish Tank» (2009), fueron recompensados con el Premio del Jurado en Cannes.

Ángulos variados 
Otras películas presentadas este año en Cannes abordan el tema femenino, desde ángulos más variados. «Mademoiselle» del surcoreano Park Chan-Wook, elevó la temperatura con un thriller lésbico en que dos mujeres terminan dando vuelta a la estratagema de hombres a los que sólo les interesan el sexo y el dinero.

El martes se estrena «Julieta» de Pedro Amodóvar, sobre el reencuentro y desencuentro de una madre con su hija a la que no ve hace más de una década y el mismo día se presentará «Aquarius» del brasileño Kleber Mendonça Filho, protagonizada por Sonia Braga en el papel de una mujer que resiste sola el asedio de un promotor inmobiliario que quiere echarla de su apartamento en Recife.

Otra película muy esperada en Cannes es «Elle» (Ella) del holandés Paul Verhoeven, donde Isabelle Huppert encarna a una mujer violada que decide afrontar a su agresor.

Se estrenará el sábado, antes de la ceremonia de clausura el domingo cuando el jurado de nueve miembros presidido por el australiano George Miller anunciará su palmarés.