Ginebra. EFE- Las leyes discriminatorias hacia las mujeres siguen presentes en las legislaciones de casi todos los países, en mayor o menor medida, y entre los casos más graves están los que afectan a los abusos sexuales, denunció ayer la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Louise Arbour.
«El fracaso en crear una igualdad real ante la ley entre hombres y mujeres en numerosas esferas sociales, económicas y políticas tiene efectos nefastos -a veces devastadores- para las mujeres en numerosos países», dijo Arbour en una declaración con motivo del Día Internacional de la Mujer. Una de las discriminaciones más perniciosas y peligrosas se refiere a los abusos sexuales, señala.