Cada 17 de mayo conmemoramos el Día contra la Homofobia, Transfobia y Bifobia (IDAHOTB) por sus siglas en inglés para recordar que la lucha por la igualdad e inclusión de las personas LGBTI continua en todo el mundo. Este año el comité IDAHOTB ha elegido el tema “Rompiendo el Silencio”.
Romper el silencio para no dejar atrás a las personas LGBTI en medio de esta pandemia del COVID-19 es fundamental. Esta crisis sanitaria no solo ha puesto a prueba a los sistemas de salud y protección social de los Estados, también demanda la adopción de respuestas sociales y económicas que sean ambientalmente sostenibles, imperativas a la igualdad de género, incluyendo a las personas LGBTI, a fin de contribuir a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030.
En la República Dominicana el impacto de esta pandemia en el bienestar socioeconómico de las personas LGBTI es considerable. En el caso de hombres gay y mujeres trans el 42.7% percibe ingresos mensuales menores a 6000 pesos[1]. Esto genera una grave situación debido a que la canasta básica familiar dominicana para el primer quintil de ingresos (las personas más pobres) está valorada a marzo de 2020 en 14,476.91 pesos.
La ausencia de un marco normativo que reconozca la identidad de género de las personas trans, las familias compuestas por parejas del mismo sexo y la protección explicita contra la discriminación por orientación sexual, identidad de género, expresión de género y características sexuales sigue representando un gran desafío en muchos países, incluyendo la República Dominicana. Así como la inclusión en las respuestas de protección social, la atención a la salud, educación y justicia sin discriminación y el amparo ante la violencia intrafamiliar y de género de esta parte de la población.
Sin embargo, esta crisis también ha demostrado la fortaleza de las organizaciones LGBTI dominicanas, las cuales están brindando servicios, visibilizando las necesidades de esta población y abogando por políticas públicas inclusivas. En palabras de Victor Madrigal, experto independiente sobre orientación sexual e identidad de género de Naciones Unidas:
“Este momento demanda el tipo de convicción y disciplina que sé que el/los movimiento/s LGBT pueden desplegar, porque los he visto desplegarlas una y otra vez. También creo que nuestra fortaleza y tenacidad, y nuestra capacidad para la bondad y la compasión, se contarán entre nuestras contribuciones sin par a la manera en la que esta gran adversidad será enfrentada[2]”.
El PNUD en República Dominicana ha implementado estrategias para proteger las necesidades y los derechos de las personas que viven bajo la presión de la pandemia, en coherencia con el Marco de Naciones Unidas para la respuesta socioeconómica inmediata a COVID-19, con especial atención en las personas que corren el riesgo de quedarse atrás como son las personas LGBTI. Estas acciones incluyen:
Acercamiento, diálogo y formación a instituciones públicas para la inclusión de las personas LGBTI en sus respuestas a la crisis.
Encuesta a ONG LGBTI con el objetivo de conocer e informar sobre las demandas de las poblaciones que atienden a socios estratégicos.
Difusión de un Directorio sobre los servicios de salud mental y otros para la población LGBTI durante el COVID-19.
Gestión para la distribución de kits de seguridad y alimentación a personas LGBTI identificadas.
Encuesta de Hogares sobre el impacto socioeconómico en República Dominicana junto al Estado como herramienta de monitoreo en tiempo real, permitiendo así mejorar las intervenciones de respuesta al COVID-19 que incluye identificar impacto en personas LGBTI.
Junto a las acciones inmediatas que realiza la sociedad civil, el Estado, el PNUD y otros sectores, y ante un eventual levantamiento de las medidas de distanciamiento social, es necesario abocarse a trabajar en una recuperación socioeconómica segura y equitativa, porque cuando ponemos a las personas LGBTI en el centro de la política pública se producen mejores resultados para toda la sociedad y el mundo.