La exsuperintendente de Competencia de El Salvador, Celina Escolan Suay, dijo ayer que las prácticas anticompetitivas restringen la competencia de buena fe, lastiman la eficiencia económica y perjudican el bienestar de los consumidores.

Precisó que las autoridades dominicanas de competencia cuentan con todos los requisitos para echar andar y hacer cumplir con esa ley, pero hace falta difundir los conocimientos de la misma.

Reconoció que la prácticas anticompetitivas son iguales en todo el mundo, donde los acuerdo entre no competidores y los abusos de dominio llenan las expectativas, pero son temas que se deben ver caso por caso.

Al participar en el desayuno organizado por la Cámara Americana de Comercio con el apoyo de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia con el tema “Sistema de garantías, derechos fundamentales y debido proceso”, explicó que los procesos establecidos en la Ley 42-08 sobre Defensa de la Competencia, indican que para llevar los casos por conductas anticompetitivad hay que garantizar el ejercicio de los derechos fundamentales del sujeto investigado y el denunciante.

Escolan Suay señaló que los acuerdos entre competidores, los cuales tienden a la fijación de la distribución de territorios, cuotas de mercado, son los más nocivos a la libertad empresarial.

Dijo que en la región de Latinoamérica se dan mucho los casos de acuerdos entre los competidores y sobre todo en las licitaciones a las entidades públicas.

Indicó que los agentes económicos son muy proclives a distribuirse las licitaciones en función de la entidad licitante, y puso el caso de su país, El Salvador.

Precisó que lo importante de estos casos es cómo se obtienen las evidencias para poder accionar de manera legal para el sometimiento judicial.

Explicó que con la liberación comercial y la eliminación de las barreras arancelarias algunos agentes económicos han sustituido estas barreras por conductas anticompetitivas.

En torno al monto económico que representan esas prácticas desleales, dijo que son cifras multimillonarias y puso el caso de un cartel de las vitaminas en su país a los cuales se le impuso una multa de US$2 millones, pero tenían dos años operando antes de la sanción.

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Electricidad

El vicepresidente de la Cámara Americana de Comercio, William Malamud, dijo que en las conversaciones del Pacto Eléctrico debe de tener una visión compartida del sector privado y público, de cuál debe ser el rol del Estado para que asegure la competencia más favorables. Señaló que ahora mismo hay activos en mano del Estado, como resultado del fracaso de la capitalización eléctrica. Sobre las plantas de carbón el ejecutivo de AMCHAMDR dijo que ellos entienden la lógica del Gobierno en producir energía barata.