El mundo de las frutas es inmenso… su grandeza es tal que diversos países cuentan con frutos que resultan extraños a la vista y al paladar.
Es común consumir frutas autóctonas de cada región; sin embargo, cuando se trata de este alimento, la lista puede ser inmensa y puede dejar sorprendido a más de uno.
La rareza, tanto en forma, color y textura, de estas peculiares frutas, las posiciona como las más exóticas del mundo.
Muchas de ellas se destacan por tener colores poco usuales, así como sabores diferentes y una textura externa e interna que las hace diferenciarse de aquellas a las que por lo regular se está acostumbrado.
Su olor también las hace únicas e inconfundibles, al menos en el caso del durián. Otras frutas combinan la textura de otras más conocidas como la piña o sandía, o bien tienen un sabor que en el paladar parece combinación de otras frutas más consumidas, que nos son muy familiares.
Fruto de hala aka puhala
En Hawái, Micronesia, Polinesia, Indonesia y las islas Marshall esta fruta es una fuente de alimentación solo superada por el cocotero del que todo se aprovecha. En el paladar sabe un poco dulce, como a pera, y es fibrosa como la piña.
Durián
Esta fruta es considerada como la más apestosa del mundo. De ella se desprende un fuerte y desagradable olor. Es común ver esta fruta en los mostradores de mercados de Bangkok, Kuala Lumpur o Singapur, donde deja un intenso olor a animal muerto (aunque algunos dicen que huele más a excremento). Sin embargo dicen que el sabor es delicioso y dulce.
Mangostino o jobo de la India
El Garcinia mangostinoa es originario de Indonesia. Proviene de un árbol tropical que mide aproximadamente entre 10 y 25 metros de altura. Su fruto está cubierto de una piel muy dura y su interior tiene una apariencia similar a los dientes de ajo.
Melón con cuerno o kiwano
En boca sabe a una mezcla de pepino, kiwi y guineo maduro y se conoce además como “melón espinudo”, “milú”, “pepino africano espinudo”, “melón de gelatina” y “calabaza con espinas” . Se dice además que muy aromático y sabroso. Es originario de África.
Salak o fruta de la serpiente
Salacca zalacca es una especie de palmera y su fruto es el «salak» o «fruto de la serpiente”. Es característico del sudeste asiático. Su interior es de color blanco-amarillento y está dividido en tres lóbulos, cada uno con una semilla similar a la del aguacate.
Rambután
Su nombre proviene de la palabra “pelo” en idioma malayo, debido a las suaves y largas espinas que la caracterizan y que hacen que esta fruta sea inconfundible. El rambután es una fruta nativa del sudeste de Asia que ahora se cultiva en climas tropicales de todo el mundo. En el país es posible encontrarla en supermercados y mercados chinos. Su sabor, ligeramente dulce, recuerda a la uva.
Fresas blancas
Debido a que su cultivo es muy limitado, quienes quieren disfrutar de esta fruta deben pagar un alto precio. Las “pineberries”, también conocidas como “fresas blancas” o “almas blancas” fueron rescatadas por un grupo de agricultores holandeses cuando estaban en vías de extinción. Tienen un sabor similar al de la piña.