La subcontratación de servicios por parte de las grandes empresas es una de las amenazas que enfrenta la actividad sindical en estos momentos, debido a que dificulta la creación de sindicatos y la afiliación.

Así lo explicó José Luis León, secretario de Acción Reivindicativa y Derechos Humanos de la la Confederación Autónoma Sindical Clasista (CASC), quien dijo que ese modelo es una forma perversa de eliminar los derechos de los trabajadores.

Al calificar ese esquema de contratación como un fraude laboral, dijo que con el mismo se aumentan las ganancias de los accionistas de las grandes empresas, en detrimento de las condiciones laborales de los trabajadores.

“Los sindicatos estamos tratando de entrar en ese modelo, pero representa un rompecabezas para nosotros, porque a los empleados se les contrata por cortos períodos, y finalmente no forman parte de las grandes empresas, sino de subsidiarias”.

En cuanto al futuro del sindicalismo en la República Dominicana, Jacobo Ramos planteó que la vigencia de este es otro de los grandes retos que tienen por delante.

Al explicar que están en un proceso de reforma, dijo que se debe integrar a los jóvenes y a las mujeres a estos cambios.

En ese contexto, se le preguntó qué impide que el relevo generacional esté presente en la alta dirigencia de los sindicatos.

“La actitud de los empresarios, que no permiten la libertad sindical, es lo que impide que haya un relevo generacional”.

Al insistírsele en la pregunta, porque no satisfizo del todo la responsabilidad que le atribuyó a los empresarios, refirió que ese tema está vinculado con la cultura política del país.

“Es una realidad en la República Dominicana que los líderes permanecen mucho tiempo activos, como el caso del profesor Juan Bosch, José Francisco Peña Gómez y Joaquín Balaguer”, planteó el dirigente sindical en el encuentro del Grupo Corripio.