Los excesivos arbitrios que cobran los cabildos a las empresas de telecomunicaciones son el principal obstáculo que tiene ese sector para desarrollar de forma sostenida sus planes de expansión.
La explicación la ofreció Oscar Peña, presidente de Claro, quien explicó que solamente esa compañía dejó de invertir, en 2010, más de US$80.0 millones por las lesivas tasas impositivas que pretendieron cobrarles distintos ayuntamientos del país, o por los trámites improcedentes que a su juicio estos establecen.
Los arbitrios que están inventando o creando los cabildos nos afectan bastante, porque en ocasiones multiplican por diez el costo de los servicios que ofrecen, destacó.
En ese sentido citó el caso del cabildo de San Pedro de Macorís, que hace más de un año prohibió en ese municipio la instalación de estaciones transmisoras de telefonía celular, en detrimento de la expansión de los servicios.
Cuando un cabildo decide imponer reglamentos al sector, por encima de la Ley General de Telecomunicaciones, tenemos un grave problema de jurisdicción y de la calidad del servicio que ofrecemos, aparte de que se bloquea la inversión, la generación de empleos y el desarrollo del sector.
Peña refirió que situaciones similares enfrentan en San Francisco de Macorís y Moca, y que en Higüey se les han pedido aportes voluntarios que exceden nuestras posibilidades económicas.
Las frecuencias. Jean Marc Hairon, presidente de Orange Dominicana, explicó que las trabas burocráticas de los cabildos y de otras entidades del Estado frenan el desarrollo de las redes de comunicación.
Pero otro inconveniente que tenemos es la disponibilidad de frecuencias, de hecho, hace más de un año que las autoridades trabajan en la creación de un plan para la atribución de frecuencias para aprovechar el potencial del país.
Y ese potencial está en todos los servicios, solamente el 25% de la población tiene acceso a internet, y para acelerar eso deberíamos tener un plan agresivo, como la red 3G Plus que instalamos en 2010, y que masifica el uso de internet, afirmó.
Si no se otorgan frecuencias rápidamente, explicó, no se puede mejorar el acceso a la internet en República Dominicana.
Con relación a las medidas que pueden contribuir con la expansión de ese servicio, dijo que los incentivos fiscales a las empresas de telecomunicaciones son el camino más corto.
Sin embargo, dijo que se pueden buscar soluciones innovadoras, como es la de ofrecer el servicio de internet independiente de la línea fija.
Sobre el mismo aspecto se refirió Peña, quien destacó que el sector está a la espera de que se realice, en mayo, una subasta nacional de frecuencias, para que los operadores adquieran su espectro de operaciones.
Mientras no tengamos ese espectro estaremos retrasados frente a otros países de la región, por lo que estamos urgiendo al Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (INDOTEL) que acelere ese procedimiento.
Ventanilla única. Liza Arzeno, directora de relaciones públicas de Tricom, planteó que otro de los inconvenientes que afecta al sector es la duplicidad de trámites que tienen que hacer para conseguir permisos, en más de una oficina pública.
Como las telefónicas necesitan instalar cables en el subsuelo y antenas en el espacio aéreo, requieren de permisos de los cabildos, del Ministerio de Obras Públicas, de la Corporación de Acueductos y Alcantarillados de Santo Domingo (CAASD) o el Ministerio de Medio Ambiente.
En ese sentido, Arzeno planteó que el sector necesita que se establezca una ventanilla única para que sean más eficientes los trámites burocráticos.
Aunque explicó que ese proceso se toma tiempo, porque se trata de muchas entidades públicas, precisó que el desarrollo de las telecomunicaciones en el país necesita de una plataforma más eficiente, menos burocrática.
Las claves
1. Las quejas
Los representantes de las empresas de telecomunicaciones afirmaron que atienden a tiempo, con parámetros internacionales, las quejas de los usuarios.
2. Las frecuencias
Si las autoridades no otorgan más frecuencias a las telefónicas, para que puedan extender sus redes, la plataforma de internet del país estará limitada, dijo Jean Marc Horion, presidente de Orange.
3. Los arbitrios
Para las telefónicas uno de los principales obstáculos son los arbitrios, que aparentemente sin control, quieren imponer los cabildos. Estas empresas necesitan del uso del suelo o del espacio aéreo para expandir sus redes. Como una exageración calificó Peña, presidente de Claro, las exigencias del cabildo de Pedro Brand que, para permitir que se instale una celda para el servicio de celulares pedían que se les pagaran 700,000 pesos.