Asumir la costumbre de quitarse los zapatos al entrar a la casa, cultura milenaria de japoneses, finlandeses, noruegos, alemanes, los Países Nórdicos … es una práctica que en Dominicana no cae muy bien.
Asumir esta cultura, no solo aseguraría mantener por más tiempo la limpieza de su hábitat, sino que le evitaría las múltiples contaminaciones que por lo general atraen los calzados del exterior.
Despojarse del calzado en la puerta además de impedir entrar suciedad, evitar las bacterias, toxinas, y lo más importante, los diversos beneficios de salud, entre los que hay que mencionar: contribuye con la postura, los dolores de espalda, el desequilibro de los movimientos, fortalece los músculos, los huesos de los pies, los tobillos, entre otros.
Andar descalzo en el hogar, según estudios, igualmente es beneficioso a nivel psicológico.
Indican datos científicos, que quitarse los zapatos y andar descalzo estimula puntos de energía que se encuentran en las plantas de los pies.
Otros de los beneficios de salud al caminar descalzo dentro de la casa es que disminuye problemas emocionales, entre estos la ansiedad, la depresión, estrés…
Que no le moleste quitárselos. Tomando en cuenta el confort, quitarse los zapatos contribuye en gran manera a ello, porque el piso se mantiene mucho más pulcro, libre de bacterias e impurezas.
Quitarse los zapatos al llegar al hogar luego de una larga jornada laboral es como dejar afuera todo el cansancio, de esa rutina, por lo que valdría la pena acogerse a esta cultura que ya no solo en los países en donde por tradición lo hacen, sino que son muchos los que la están asumiendo no solo por ornato, sino por salud.
Importante saber. Revela una investigación realizada por Charles Gerba, profesor de microbiología de la Universidad de Arizona, que a través de los calzados se introducen al hogar mayor cantidad de bacterias que las que se acumulan en el inodoro durante dos semanas. Indica además, que en dos semanas los zapatos llegan a acumular 420.000 bacterias.