PUERTO PRÍNCIPE. El gobierno de Haití tachó de «injerencia política» el apoyo de la misión de la ONU de apoyo a la justicia ( Minujusth) por los avances de una investigación en un caso de corrupción en el que estarían implicados varios exministros del país.
«Una organización internacional no puede pensar en venir a Haití y hacer declaraciones partidistas, porque este tema es eminentemente político», denunció ayer el primer ministro, Jack-Guy Lafontant en una conferencia de prensa.
«Haití no es una jungla, sino un país soberano», repitió varias veces el jefe del gobierno.
Minujusth disgustó el domingo a las autoridades al elogiar el nombramiento de los jueces encargados de investigar las denuncias presentadas desde el inicio del año por el caso Petrocaribe.
Haití se ha beneficiado durante 12 años del programa Petrocaribe, iniciado por el expresidente venezolano Hugo Chávez, que permitía a varios países de América Latina y el Caribe adquirir productos petrolíferos a bajo costo y pagarlos en 25 años con una tasa de interés de 1%.
En 2016 y 2017, dos investigaciones del Senado de Haití sobre el uso indebido de casi 2.000 millones de dólares del fondo Petrocaribe señaló a una docena de exministros del partido en el poder, pero nunca se inició un proceso legal contra ellos.
«Celebro la iniciativa y el papel activo de los ciudadanos haitianos y la sociedad civil comprometidos en la lucha contra la corrupción y la impunidad», dijo Susan Page, directora de Minujusth.