Los playoffs de este año extrañarán por primera vez en muchos años al jugador súper estrella LeBron James.
Aún más, sus seguidores y contrarios también deberán sentir nostalgia.
Y es, que desde muy temprano su nuevo equipo de Los Angeles Lakers fue eliminado, algo que debe haber llenado de tristeza al carismático baloncestista.
El pobre récord de Los Lakers de 37-45 fueron más que suficiente para quedar fuera del dinero, y desde ya prepararse para la temporada que viene.
La franquicia de la gran ciudad de Los Angeles finalizó en el décimo puesto en la Conferencia Oeste.
Muchos piensan que en realidad James no impacto en su nuevo equipo, pero sus números dejan bastante claro que necesitó otro jugador líder a su lado para sacar a flote a esa exitosa franquicia.
La tropa concluyó jugando muy bien al ganar seis de sus últimos diez partidos, pero sin ningún tipo de finalidad.
James promedió 27.4 puntos por encuentro, 8.3 asistencia y 8.5 rebotes, algo notorio para cualquier jugador.
Se trató apenas de la tercera vez que “The King” no avanza a las fases de eliminación directa del máximo circuito de baloncesto en Estados Unidos, sin embargo, hay que remontarse 15 años atrás, en la temporada 2003-2004, para recordar la primera vez que se quedó fuera de los playoffs, cuando era jugador de los Cleveland Cavaliers.
La segunda ocasión que también brilló por su ausencia en la siguiente fase fue justo en la siguiente temporada, la 2004-2005, también con Cavaliers.
A partir de entonces había accedido hasta ahora a todos los playoffs de la NBA, disputando incluso nueve finales, ocho de ellas de forma consecutiva, para proclamarse campeón en tres ocasiones.
Fue justo el año pasado cuando LeBron James disputó su última final, la cual perdió con los “Cavs” y fue ahí cuando aceptó la oferta del “Magic” Johnson de jugar con Lakers, con la esperanza de regresar a la quinteta angelina a los playoffs, algo que no ocurre desde 2013, sin embargo, fracasó en el intento.
Pero lo cierto es que LeBron no fue el culpable del “debacle”, ya que una vez más alcanzó números sobresalientes, digno de cualquier jugador de primera línea.
Pero lo cierto es que la Conferencia Oeste es la más difícil de clasificar de la NBA, por contar con franquicias como Golden State Warriors, Houston Rockets, San Antonio Spurs, Oklahoma Thunder City, Portland Trail Blazers, Utah Jazz, Angeles Clippers, Denver Nuggets, entre otros.