El diputado peledeísta Orlando Espinosa sometió ayer un proyecto de ley que busca despenalizar el aborto cuando peligre la vida de la madre y en casos de violación e incesto.
Según la iniciativa, el embarazo puede ser interrumpido cuando “no supere las 16 semanas de gestación y siempre que exista un comprobado riesgo para la vida de la embarazada y así conste en un experticio médico”.
La práctica también estaría permitida cuando existan “riesgos de graves anomalías en el feto que afecten su nacimiento vivo y viable, y así conste en un dictamen emitido por los médicos especialistas”.
Asimismo, se plantea que la mujer violada estará obligada a declarar su caso ante el Ministerio Público y las autoridades de Salud Pública, y éstas deberán suministrarle “un anticonceptivo de última generación antes de las 72 horas”.
Además, “cuando una mujer haya tenido una relación incestuosa con un hombre en contra de su voluntad”.