Legisladores y representantes de organizaciones de la zona fronteriza advirtieron ayer que si son eliminados los beneficios que contempla la Ley 28-01, se produciría un estancamiento en esa demarcación y sería ocupada por haitianos, situación que, según entienden, debe evitarse.
El diputado peledeísta por Baoruco Rafael Méndez sugirió a los empresarios que propugnan por la modificación de esta legislación que inviertan en la zona en vez de oponerse a su desarrollo.
La comisión que estudia la propuesta, presidida por el diputado José Antonio Díaz Reyes, recibió a representantes de 23 organizaciones que argumentan que el artículo 36 de la Ley de Reforma Fiscal autoriza al Congreso Nacional a proceder a su revisión, no así a modificarla. Depositaron un documento firmado, entre otras personalidades, por los obispos de las diócesis Mao-Montecristi, Diómedes Espinal; de San Juan de la Maguana, José Dolores Grullón, y de Barahona, Rafael Felipe Núnez.
Erickson Taveras, vocero de las organizaciones, indicó que si las empresas de la zona fronteriza pierden los privilegios que les otorga la Ley 28-01 desaparecerían en detrimento de miles de trabajadores.
La legislación beneficia con exenciones fiscales especiales a las empresas que operan en las provincias Pedernales, Independencia, Elías Piña, Dajabón, Montecristi, Santiago Rodríguez y Baoruco.
En la reunión participaron también los congresistas Bernardo Alemán, Nancy Santos y Francisco Bautista, de Elías Piña, y Héctor Féliz, de Pedernales, quienes intervinieron a nombre de los 21 diputados de la región fronteriza.