POR GERMAN MARTE
El presidente Leonel Fernández dijo ayer que el país está tratando de salir de una de las crisis económicas más severas que ha tenido en su historia, pero advirtió que para superar la situación se precisa del concurso de todos los sectores nacionales y que es necesaria la aprobación de la reforma fiscal en el Congreso.

Manifestó que para que el país pueda superar la situación en que se encuentra, se precisa de la participación de la colaboración de las fuerzas políticas, empresarios y de todos los sectores de la vida nacional.

 “Y para que podamos avanzar en lo inmediato,  se requiere la aprobación de una reforma fiscal”, resaltó.

Consideró que esa reforma fiscal debe asumirse con el mismo criterio de cooperación en base al interés nacional con que se han asumido las reformas anteriores.

Advirtió que si el debate de esa reforma se convierte en un conflicto entre fuerzas políticas, los más afectados serían los pobres.

Afirmó que el gobierno puede manejarse con la situación fiscal que existe hoy día.

Empero, indicó que si no se aprueba la reforma fiscal, entonces no tendría sentido haber suscrito el Tratado de Libre Comercio.

Precisó que no aprobar la reforma fiscal implica que se seguirán perdiendo empleos en las zonas francas, entre otras consecuencias negativas para el país.

Fernández dijo que la crisis heredada por su gobierno se debió a un manejo inadecuado de política fiscal, monetaria y cambiaria que condujo a un incremento de la deuda pública (interna y externa) hasta llevarla al nivel de 55% del Producto Interno Bruto.

“La deuda prácticamente se duplicó en cuatro años; ahí está el origen del malestar que la República Dominicana ha estado experimentando”, expresó el Presidente al pronunciar el discurso de clausura en el seminario “La Economía Dominicana: Desafíos y Oportunidades”, celebrado durante el fin de semana en el hotel Dominican Fiesta.

Dijo que la crisis que encontró al asumir el gobierno era de tal magnitud que durante el primer año de su gestión tuvo  que crear un equipo de gerencia de crisis “y ese equipo ha trabajado sobre los factores que dieron origen a la crisis”.

Lo que se ha hecho, abundó Fernández, es tomar medidas de corto plazo en gerencia de una crisis para volver a establecer los fundamentos de funcionamiento de la economía dominicana en el ámbito fiscal, monetario, cambiario y las demás medidas que se derivan de estos factores: reducción de la inflación, de la tasa de interés y reactivación del crecimiento de la economía.

Añadió que con la firma del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional se buscó rescatar la confianza en la solvencia pública del país.

“Y entendemos que al cabo del primer año de gobierno eso se ha cumplido”, afirmó el presidente quien, no obstante, advirtió que no se debe caer en la autocomplacencia, “porque con este primer año de gestión de crisis lo que se ha logrado es que el paciente (el país) bajo cuidados intensivos haya sido trasladado a una sala de paciente en recuperación”.

“Al paciente de la economía dominicana no se le ha dado de alta, lo que ha cambiado es de sala, pero sigue siendo un paciente frágil”, añadió.

 Fernández se mostró flexible y dijo que está dispuesto a escuchar a todos los sectores que se sientan afectados por la reforma fiscal.

En el seminario participaron empresarios, políticos, representantes de organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, de partidos de oposición y organizaciones de la sociedad civil.

OBJETIVOS DEL MILENIO

Por otro lado, el mandatario señaló que la República Dominicana no dispone de los US$29,000 millones necesarios para alcanzar las Metas de Desarrollo del Milenio en las Naciones Unidas.

Dijo que el país se comprometió a reducir a la mitad la pobreza en los próximos diez años, reducir la mortalidad infantil y materna, reducir la malaria, el VIH/Sida, tuberculosis y  otros problemas sociales graves.

Explicó que como el Producto Interno Bruto del país es de US$18,000 millones, el costo de los Objetivos del Milenio es mayor que el PIB en un año, “y eso quiere decir que no hay recursos en el país para cumplir” con esas metas.

Empero, añadió que es posible alcanzar las metas si la comunidad internacional aporta recursos para hacerlo.

TASA DE CAMBIO

Sobre la tasa de cambio, el Presidente dijo que en esta como con todo, se requiere de un equilibrio de modo que sea competitiva para los sectores generadores de divisas, pero que no resulta perjudicial para el resto de la población.

“Porque un peso que se devalúe significa inflación para los pobres. Ahora, un peso que se sobrevalúa significa entonces falta de competitividad para los sectores generadores de divisa”, explicó.

Insistió en que se precisa un balance, empero, indicó que este lo establece el mercado.

Afirmó que existe una tasa flexible, flotante, por lo que –recalcó- el valor de la moneda lo irá indicando el mercado.

El mandatario señaló que si la tasa de cambio no estuviese en los niveles en que se encuentra, con la tarifa tan alta que ya se tiene en el sector eléctrico, sería insostenible.

Explicó que tal como está el kilovatio/hora, a 22 centavos de dólar, con la tasa a RD$30 por dólar, “si esa tasa estuviera a RD$40 por US$1, ó a RD$50 por US$1, ó a RD$60 por US$1, sencillamente la economía dominicana se desplomaría”.

Manifestó que durante el primer año de su gobierno la tasa de cambio –a los niveles en que se ha mantenido- ha contribuido a que no se produjese el desplome definitivo de la situación.

Si la tasa de cambio hubiese estado a RD$37 por US$1, como indicó originalmente el Fondo Monetario Internacional, el galón de gasolina estaría cercano a los RD$200, aseveró.

“Y yo me pregunto, a RD$200 el galón de gasolina ¿Es sostenible la sociedad dominicana? Yo creo que ya tendríamos algunos estallidos sociales”, enfatizó.

 Refiriéndose a quienes reclaman que el dólar esté más caro, el Presidente dijo que hay elementos que son racionales desde el punto de vista económico, pero que no son sostenibles desde el punto de vista social y no son viables desde el punto de vista político.

Dijo que “hay decisiones que desde el punto de vista económico son impecables, pero desde el punto de vista de la viabilidad política, porque van a llevar a un trastorno, a una tensión, a  muertes y a la pérdida de la legitimidad democrática, y con eso perdemos”.