POR FIOR GIL
LA ROMANA.-El presidente Leonel Fernández dijo ayer aquí que los sectores que quebraron el país durante los últimos cuatro años y que pretenden seguir quebrándolo, provocarían el cierre de las zonas francas que han generado empleo y riqueza durante 25 años si se negaran a aprobar el tratado de libre comercio y la reforma fiscal.

Hablando ante cientos de personas reunidas en el polideportivo de esta ciudad, Fernández afirmó que hay quienes están haciendo demagogia diciéndole al país que no se sientan en la mesa del diálogo con el gobierno porque no van a aprobar nuevos impuestos.

«Y nosotros les decimos que se dejen de esa demagogia, porque el gobierno no ha propuesto impuestos nuevos, el gobierno ha propuesto un cambio de modelo fiscal».

Afirmó que a los dirigentes opositores que han dicho que no van a dialogar con el gobierno para aprobar el TLC y la reforma fiscal nadie los ha invitado a conversar y los culpó de haber quebrado el país en cuatro años y de querer seguir quebrándolo.

«Pero eso no se lo vamos a permitir», dijo Fernández durante el acto que encabezó para dejar juramentado el Consejo Provincial de Desarrollo.

Reiteró que el gobierno no se propone crear nuevos impuestos y advirtio que no aprobar el TLC y la Reforma Fiscal condenaría a las zonas francas a cerrar sus puertas, lo que, según afirmó, el gobierno no permitiría.

Dijo que la oposición no debe decir que no va a bailar en una fiesta a la cual no ha sido invitada, «pero de lo que si estamos conscientes es que si no aprueban la reforma fiscal , sino ratifican el TLC, le están diciendo a las zonas francas que cierren sus puertas y no vamos a permitir que por una actitud de bravuconería las zonas francas no sigan generando empleo y no sigan generando la riqueza que le han proporcionado a este país en los últimos 25 años».

Dijo que los sectores que quebraron el país durante los últimos cuatro años pretenden seguir quebrándolo con su actitud tozuda, «pero no lo lograrán porque este pueblo está dispuesto a que se respeten sus derechos, y si no lo creen así, que esperen el proximo 16 de mayo y escuchen la consigna una vez más de que es pa´fuera que van».

Afirmó que en ningún momento el gobierno ha hablado de nuevos impuestos y en cambio ha planteado sustituir la comisión cambiaria y las recaudaciones de aduanas que se aplican también al comercio exterior por impuestos internos, que significa una compensación.

Explicó que con la entrada en vigencia del TLC el gobierno perdería o dejaría de obtener RD$30,000 millones anuales por concepto de impuestos al comercio exterior y RD$21,000 millones que genera la comisión cambiaria, más RD$3,000 millones al año que recauda la aduana y que esos recursos se deben recuperar con impuestos internos.

«En otras palabras, tenemos que compensar con impuestos internos en una sustitución del modelo fiscal donde el comercio exterior pierde importancia desde el punto de vista económico y tiene que reorganizarse en base a impuestos internos», dijo.

Fernández dijo que el actual gobierno encontró el país en una profunda crisis de confianza por la devaluación del peso y una inflación que rondaba el 45% con una proyección del crecimiento económico negativo.

Dijo que, sin embargo, en el primer semestre de esta gestión ya el país había recobrado un crecimiento económico de 5.8% del Producto Interno Bruto (PIB) y una inflación de 0.8.

Afirmó que el gobierno no solo ha debido conjurar la crisis, sino también entrar en un proceso de transición de un modelo económico a otro impuesto por circunstancias internacionales y que ha sido sobre esas condiciones que se ha firmado el TLC.

Refirió que durante los últimos 25 años se produjo el desarrollo del país por los beneficios otorgados a las exportaciones de bienes y servicios amparados en la Iniciativa de la Cuenca del Caribe, libre de aranceles, que permitió el éxito de las zonas francas.

Agregó que Estados Unidos han planteado que ese comercio debe ser un camino de doble vía y que el mercado de la República Dominicana tiene que ser abierto a las importaciones de esa nación, lo cual justifica como una forma de reciprocidad.